Más de treinta adultos mayores fueron los que asistieron al Centro Cultural de Seguridad Vial para compartir su experiencia, tanto como conductores como peatones, y así enseñar a los más jóvenes diversos hábitos que hacen que este segmento de la población sea uno de los que tiene menor accidentabilidad.
Por medio del uso de simuladores, las personas mayores demostraron su prudencia y apego a las normas del tránsito al momento de conducir. Según cifras de la Comisión Nacional de Seguridad del Tránsito (CONASET), el grupo etario de mayor accidentabilidad son los jóvenes, entre 18 y 29 años. Éstos representan aproximadamente el 26% del total de conductores fallecidos en accidentes de tránsito en los últimos años.
Cifra que, según el mismo estudio, aumentó un 50% más en 2017, lo que llevó a que, los siniestros viales se hayan convertido en la primera causa de muerte por razones externas de este grupo etario en el país, pese a las sucesivas campañas para prevenir estos hechos por parte de la autoridad.
En la vereda de enfrente, de acuerdo a datos de la CONASET, sólo un 15% de los accidentes dieron como resultado la muerte de un conductor de la tercera edad.
“Son un grupo de bajo riesgo y tenemos cifras que lo respaldan y es por eso que quisimos hacer esta actividad con ellos, ya que son un ejemplo, tanto al volante, como en seguridad del tránsito. Tendremos por eso, un grupo de adultos, que participarán de una charla y luego demostrarán la prudencia al conducir, lo que será validado con la interacción de cada persona en los simuladores del Centro Cultural”, señala Rolando Galleguillos, Jefe Centro de Cultura de Seguridad Vial Mutual de Seguridad CCHC.
Por su parte, el director nacional de SENAMA, Rubén Valenzuela destacó que “las personas mayores que conducen se destacan por su prudencia y por el respeto a las normas del tránsito. Además, es importante recordar que ellos deben enfrentar controles periódicos, tanto de salud como psicotécnicos, para renovar sus documentos. En este sentido, la edad no es impedimento para conducir y las cifras demuestran que este segmento de la población tiene un tasa muy baja de accidentabilidad”.
Según un estudio realizado por Automóvil Club de Chile, las razones de estas estadísticas, se dan por varios motivos, entre ellos está que ante las dificultades físicas propias de la vejez, las personas mayores actúan con mayor prudencia. Por ejemplo, la mayoría (más del 90%) utiliza cinturón de seguridad, más del 80% evita conducir bajo los efectos del alcohol, un 75% elude realizar frenadas bruscas y un 67% le realiza periódicas mantenciones a su automóvil.
El Centro Cultural de Seguridad Vial de la Mutual de Seguridad, realiza una serie de actividades y pone su experiencia al servicio de Chile para abordar los factores que inciden en los accidentes que ocurren en la vía pública e impulsar los cambios culturales y regulatorios necesarios para su prevención.
Es así como ofrece de manera gratuita a la comunidad, la oportunidad de participar en talleres y jornadas de educación, programas para adultos mayores y también niños de educación básica, jornadas para equipos de trabajo en empresas, entre otros.
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