La tecnología se ha convertido en una herramienta fundamental en el desarrollo de la maternidad actual, sin embargo, las madres que no saben como acceder a ella se sienten rezagadas.
Saber la frecuencia de contracciones en el embarazo en una app, subir fotos de sus bebés a Instagram, aprender a cambiar pañales en un canal de Youtube o informarse acerca de las actividades escolares de sus hijos son tareas cada vez más comunes en las madres actuales.
La tecnología ha resultado un apoyo para las madres «millenials» y un reto de actualización para las madres mayores, quienes han tenido que integrarse a marchas forzadas a esta nueva forma de desenvolverse en el actuar cotidiano.
«Las mamás modernas han tenido una forma diferente de actuar en el mundo», señaló la psicóloga y doctora en psicoterapia Nancy Steinberg.
Para la especialista, la tecnología se ha convertido en una herramienta fundamental en el desarrollo de la maternidad actual, pues a través del uso de esta las mamás han logrado «conectarse con un mundo en el que están los amigos, el trabajo, la escuela y los hijos», aseguró.
«Esto se ha convertido en una fuente importante para las madres de familia, porque pueden estar conectadas con la información que les interesa, estar al pendiente de los hijos y estudiar o trabajar si así lo desean», señaló.
De acuerdo con la psicóloga, esto ha venido a cambiar paradigmas, sobre todo porque hace un par de décadas, las mujeres muchas veces se veían obligadas a decidir entre ser madres o su crecimiento personal.
«Hoy vemos muchas mujeres que estudian licenciaturas o maestrías en línea, o que incluso han encontrado una fuente de trabajo en internet», señaló.
Por ejemplo, de acuerdo con datos proporcionados por la firma emarketer.com, solo en Estados Unidos actualmente existen 4,2 millones de madres que tienen un blog.
En promedio, ellas mencionan 73 marcas de productos para bebés cada semana y algunas cuentan con gran influencia en sus seguidores.
Sin embargo, para las madres que nacieron antes que las «millenials», la situación no ha sido tan sencilla.
Según el Inegi, las personas con menor uso del internet son mujeres de más de 55 años.
Aquí, el papel de los hijos ha sido fundamental, ya que según una encuesta realizada por Groupon Latam, en Colombia, Chile, Perú, México, Argentina y Brasil el 63 % de los hijos encuestados afirman que fueron ellos quienes les han enseñado a sus madres a usar la tecnología.
«Esto ha significado un reto, porque quienes han tenido que adoptar o adaptarse a la tecnología muchas veces se sienten amenazadas o rezagadas», señaló Steinberg.
La especialista llamó a hacer un uso responsable de la tecnología y no olvidarse de que lo más importante es pasar tiempo de calidad con los hijos.
