Educación
El cambio de paradigma que trae aparejado el currículum de Singapur, exige a los colegios que adoptan el programa, conseguir que los profesores se apropien del instrumento, logrando clases más dialogadas y participativas, para impactar de forma real y concreta en un aprendizaje con sólidas bases.
Impulsar el desarrollo de las habilidades superiores del pensamiento, dejando entrever que todos podemos aprender matemática de manera muy sencilla y en un formato colaborativo. Ese es el objetivo del denominado Método Singapur, que ya se aplica en varios establecimientos educacionales del país para optimizar el rendimiento en el aula, cruzando la teoría con el apoyo de material concreto para maximizar la comprensión de la asignatura.
“Se trata de visualizar de forma lúdica en los profesores diversas técnicas que enfatizan la apropiación, comprensión y aplicación del conocimiento en matemáticas, mediante un enfoque de enseñanza progresiva, basado en el desarrollo de la metacognición usando y la resolución de problemas”, dijo al respecto el profesor y experto en edaucación Ulises Hidalgo.
El docente viajó en agosto pasado a Singapur, oportunidad en la que visitó las oficinas centrales de Marshall Cavendish Education (MCE) y diversas escuelas de la ciudad Estado para observar las clases de matemáticas y ciencias, además de sostener encuentros con los equipos directivos para profundizar en los usos que le dan a la metodología con sus estudiantes.
«Las clases al otro lado del mundo no duran 45 minutos, sino 30 minutos. La jornada escolar es más corta que en Chile, más participativas y los resultados están a la vista. Son una potencia mundial porque se dieron cuenta que la clave del desarrollo se jugaba invirtiendo en la formación de excelencia de los docentes para formar escolares de excelencia», dijo.
El cambio de paradigma que trae aparejado el currículum de Singapur, exige a los colegios que adoptan el programa, conseguir que los profesores se apropien del instrumento, logrando clases más dialogadas y participativas, para impactar de forma real y concreta en un aprendizaje con sólidas bases.
En Chile el Método se propaga oficialmente gracias a la gestión y promoción que impulsan los representantes de MCE, en alianza con Editorial Santillana y SBS Capacitación. Su foco se centra en visitar colegios y escuelas para explicar al mundo docente las fortalezas y oportunidades que trae el impulsar desarrollos de las habilidades superiores utilizando este sistema, más cuando lo que se busca es precisamente estimular en los escolares una forma verdaderamente eficaz de asimilar las matemáticas de forma amigable dentro de cada sala de clases.
La profesora de matemáticas Cecilia Rosales, de SBS Capacitación, explica que “en pocos minutos el Método Singapur demuestra su efectividad en los escolares para asimilar los conocimientos, logrando su internalización y dominio, mediante un enfoque pedagógico que activa el desarrollo de habilidades y destrezas del pensamiento superior”.
Por su parte Cristina Carrasco, quien trabaja en el Colegio Nacional de Villa Alemana como jefe de UTP y profesora de matemáticas del primer ciclo de ensañanza básica en el Colegio Nacional de Villa Alemana, sostiene que «la metodología creada en Singapur logra activar el gusto por aprender las matemáticas, porque a los escolares ya no les interesa el origen de las fórmulas, sino comprender la forma de aplicarlas con técnicas lúdicas, más visuales y concretas para trabajar sumas, adiciones o sustracciones».
