Lo análogo se resiste a morir en un mundo donde los»momentos sin tecnología» están bajo amenaza

Por  Leslie Hook*

Imagina un campamento de verano donde está prohibido el uso de smartphones y la comunicación instantánea   y donde los libros, canciones y conversaciones formen parte del  día a día. Los niños pueden escribir cartas a sus hogares, que  son escaneadas y enviadas por correo electrónico después de tres días para imitar el tiempo de demora del correo tradicional. Cuando los padres responden, ocurre el mismo proceso.

Si este escenario suena como tu campamento soñado, entonces probablemente disfrutarás el libro de David Sax “La Revancha de lo Análogo: las cosas reales y por qué importan”. Este libro hace un tributo al pasado,  y por eso el ejemplo del campamento de verano donde el autor pasó su infancia y que trajo de vuelta la tendencia de replicar los plazos del correo tradicional para preservar “Los momentos sin tecnología que se encuentran bajo amenaza”.

Sax, un periodista del área de negocios y cultura, sigue su propio redescubrimiento de los medios hipster análogos, desde los discos de vinilo y juegos de mesa hasta las libretas. A partir de allí, analiza las tendencias ‘’análogas’’ en todos los sectores, desde la manufactura a la educación y el mercado minorista.

A pesar de que el libro en ocasiones se vuelve nostálgico, alcanza su punto más alto cuando destaca las maneras sorprendentes en que el mundo digital ha dado una nueva vida a las formas análogas. Han aumentado las ventas de vinilos, y eso queda comprobado ya que las personas han comprado más discos en los últimos diez años que en los veinte años anteriores combinados. Como el streaming  de música digital se vuelve cada vez más fácil, sólo díganle a Siri o Alexa que les reproduzca alguna canción que les guste,  los receptores pagarán más por un medio menos conveniente, que requiera atención e interacción física.

Existen otras áreas relacionadas con plataformas digitales, tales como la página de financiamiento Kickstarter, que han ayudado a impulsar el resurgimiento del  entretenimiento tradicional, como los juegos de mesa.  Sax describe cómo el juego de cartas más vendido llamado “Cartas contra la Humanidad”, fue creado por un grupo de amigos gamers, quienes querían crear algo que girara en torno a la interacción personal. También destaca el vínculo entre el surgimiento de diseñadores independientes de videojuegos y el resurgimiento de juegos de mesa tradicionales entre la juventud.

Patrones similares se pueden encontrar en las películas y revistas, plantea Sax. Por ejemplo, la popularidad de la cámara Lomo se debe en parte al nivel de culto que adquirieron sus fotografías vía online en los inicios del Internet. Y un aumento explosivo de las publicaciones ‘’zines’’ y revistas “niche” se ha visto empoderado gracias a los blogs y las comunidades niche online.

Las libretas Moleskine y la Palm Pilot, salieron al mercado a finales de los años 90, señala Sax. Uno de ellos ha visto un incremento en sus ventas, debido al exitoso mercadeo  la marca que  se ha posicionado como el símbolo vintage de la creatividad e inteligencia. El otro, ha sido relegado al olvido.

El autor da ejemplos como estos para validar que el medio análogo es cada vez más valioso en la era digital. Está en lo cierto cuando dice que los productos tradicionales no han desaparecido, ya que los lectores aún compran libros y la gente aún utiliza hojas de papel. Pero éstos son hechos aislados en tiempos donde aumentan todas las ventas de música digital, juegos online y libros digitales.

Hay un área diferente donde el argumento pro-análogo de Sax resulta ser más fiel, y esto es en el sector del mercado minorista. Los límites del comercio electrónico se han hecho evidentes durante el año pasado y un ejemplo de ello es que Amazon abrió librerías físicas e incluso un supermercado. En Estados Unidos, el 90% de las ventas de mercado minorista  aún se registran en las tiendas físicas, motivo por el que Amazon está ansiosa por obtener una ganancia de ello. De hecho, las librerías han visto un leve resurgimiento de sus cifras desde la crisis económica, asegura Sax. Para los clientes, aún no existe el sustituto perfecto para recoger un producto en la vida real.

Sax aplica su marco de lo digital versus lo análogo a la manufactura, lamentando la ausencia de trabajos en ciudades tales como Detroit. Sin embargo, la automatización industrial es más bien un fenómeno que difiere de la digitalización, que corresponde al tema central del resto del libro. A la vez, Sax se deja llevar por la idea de que la “economía digital” es la culpable de la crisis económica.

Estas pinceladas demasiado amplias a veces ocultan el argumento clave, que se reduce a esto: el hecho que cada vez existan más opciones digitales no significa que son mejores que las anteriores. Esta conclusión es difícil de debatir, ya sea si estás leyendo un libro a través de Kindle o en su versión física.

* Traducido por Nicole Bahamondes, Traducción inglés-español, Universidad Arturo Prat.