Un llamado a las fuerzas que integran la Concertación a constituirse en oposición de manera amplia, unitaria y decidida en todos los espacios institucionales y sociales del país, a fin de enfrentar al gobierno de Sebastián Piñera, fue uno de los postulados que esta noche dio a conocer el presidente interino del Partido Socialista, senador electo Fulvio Rossi, ante los delegados del Comité Central.
Durante la presente jornada, la instancia partidaria reunida en el Congreso Nacional en Santiago eligió al resto de los miembros de la directiva que acompañará al legislador hasta el 25 de abril de 2010, cuando se efectúen los comicios para renovar a la mesa del PS.
Como secretario general quedó Manuel Monsalve; y como videpresidentes: Fidel Espinoza, Mariana Arellano, Jorge Ayala, Patricia Roa, Juan Valdés, y Martín Fritz.
En su discurso Rossi dijo que el actual escenario, tras la reciente elección, hacen necesario reconstruir una alternativa de centro-izquierda, que reivindique el papel del Estado en la vida económica, social y político en el desarrollo de Chile.
«Las causas y responsabilidades de la reciente derrota son múltiples y su
análisis requiere tiempo, rigurosidad y prudencia. Asimismo, requiere ser metódico y sistemático para arrojar frutos positivos», sostuvo el parlamentario.
LA RENUNCIA QUE NO FUE Y EL MEA CULPA DEL PDC
Asimismo, este sábado el Consejo Nacional Ampliado de la Democracia Cristiana (DC) objetó la dimisión formulada al mediodía por el diputado Juan Carlos Latorre.
La instancia partidaria reflexionó acerca de las causas de la derrota en la elección presidencial, estableciendo que «este resultado hace evidente que, a pesar de los grandes avances de estos veinte años, hemos perdido sintonía con la ciudadanía, nos hemos desgastado en rencillas de poder y permitimos el debilitamiento de la Concertación y sus partidos. Nuestro proyecto inicial perdió fuerza y no supimos interpretar la nueva sociedad que nosotros mismos ayudamos a construir».
Junto con lo anterior, el PDC «reitera y reafirma su vocación concertacionista. Compromete su esfuerzo en la renovación de su proyecto político desde los valores fundacionales de respeto a los derechos humanos, profundización de la democracia, defensa de la libertad y la justicia social. Para ello debemos volver a construir un movimiento social y ciudadano capaz de interpretar la nueva sociedad y de convocar a una nueva mayoría nacional. Esta tarea requiere fortalecer la identidad de la Democracia Cristiana».
El Consejo Nacional Ampliado aprobó también la propuesta de la directiva para concretar la renovación de sus autoridades nacionales, regionales, provinciales y comunales (en elecciones un militante un voto) el 25 de abril y el 11 de julio respectivamente.
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