El senador Hernán Larraín, de la Unión Demócrata Independiente (UDI), acusó que las consecuencias del terremoto ocurrido el pasado sábado, no pudieron ser resueltas por negligencia, ineptitud y falta de claridad.
El legislador acusó que las zonas de Parral y Cauquenes «quedaron absolutamente abandonadas, sin ninguna preocupación, sin ningún apoyo exterior» de parte de las autoridades regionales o nacionales.
Larraín se quejó de que «aquí no hubo planificación de la emergencia, porque si lo que ha ocurrido es producto de esta planificación, realmente nuestra emergencia es una broma de mal gusto» y condenó que no se haya tenido «respuesta de las autoridades para prevenir esta situación».
El parlamentario valoró el «cambio positivo» que significó para las zonas afectadas el haberse declarado Estado de Catástrofe, pero volvió a acusar que las «autoridades regionales y locales han brillado por su ausencia».
Finalmente, Larraín agregó que «hay muchos sobrevivientes que se sienten abandonados sin recursos para nada».
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