En fallo dividido, la Tercera Sala de la Corte Suprema acogió este jueves un recurso de protección presentado por el estudiante universitario Wilson Mella Valenzuela, quien fue expulsado de la Universidad Austral de Chile, sede Puerto Montt, a raíz de un reglamento interno del establecimiento que autoriza a aplicar esta medida cuando un alumno es condenado por un delito.
Mella Valenzuela fue sentenciado a penas de 61 días de presidio por el Tribunal Oral en lo Penal de Antofagasta y 40 días de presidio por el Tribunal de Garantía de Quilpué.
En la resolución judicial, los ministros Héctor Carreño, Pedro Pierry, Sonia Araneda, Haroldo Brito y el abogado integrante Jorge Lagos determinaron que «tal obrar es arbitrario, carente de razón por irreflexivo, seguramente en el afán de separar a estudiantes que en concepto de la autoridad no pueden integrar la comunidad universitaria, para lo que fijan estándares de comportamiento».
La sentencia de los magistrados agrega que este tipo de proceder «contraría claramente una política criminal encaminada a la reinserción social, en la que especialmente existe preocupación por los jóvenes y primerizos».
En ese sentido, el dictamen complementa su razonamiento expresando que «en efecto, existen variadas instituciones alternativas al cumplimiento efectivo de las penas de encierro, y la experiencia indica que estos programas son exitosos en la medida que los sentenciados dispongan de posibilidades que los sustraigan de contactos criminógenos, entre ellos ciertamente la educación superior que los habilita para alcanzar autonomías», dice el fallo.
Por último, los jueces señalan que «el acto impugnado es discriminatorio, pues excluye de la comunidad universitaria a un alumno que no ha desarrollado ninguna conducta que la lesione, sólo por habérsele condenado en causa criminal, en circunstancias que en las mismas sentencias se le concedió beneficios encaminados a su reinserción».
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