El diputado Gabriel Ascencio (DC) afirmó este lunes que la permanencia de Jacqueline van Rysselberghe en el cargo de intendenta del Biobío, «es una muy mala noticia para Chile, y una clara muestra de que el Gobierno ha cedido a la presión y amenazas que le hizo la UDI, y ha legitimado la mentira como forma de actuar de sus autoridades».
«Ellos (el Ejecutivo) prometieron el máximo de eficiencia, credibilidad y transparencia en su gestión, y han hecho todo lo contrario. Hoy han ratificado en su cargo a una intendenta que, sin ningún pudor, ha reconocido que mintió para entregarle beneficios (a pobladores), sólo pensando en una futura candidatura senatorial», dijo el parlamentario.
Agregó que «con este respaldo (a la intendenta), los damnificados de las regiones del país y, en general quienes necesitan ayuda de parte del Estado, hoy han sido notificados que deben ser parte de los ‘regalones’ de las autoridades del actual gobierno para recibir algún beneficio».
El legislador sostuvo que al Presidente Sebastián Piñera «no le importó lo que pasa en la Octava región ni ayudar a quienes efectivamente resultaron damnificados. El único interés y preocupación que tuvo a la vista y del cual se preocupó, fue el de no tener problemas con la UDI ni perjudicar a una eventual candidata a senadora de ese partido».
«Por ello, como oposición, hoy más que nunca se nos transforma en un deber impulsar una acusación constitucional en contra de Jacqueline van Rysselberghe, para que su actuar reciba la sanción política que la Constitución establece», enfatizó.
Finalmente, el diputado Ascencio dijo que «la UDI ha demostrado un doble estándar y ‘carepalismo’ absoluto. Hoy defienden y hasta justifican, sin ningún asomo de vergüenza, situaciones que en el pasado hubieran sido los primeros en salir a condenar y perseguir drásticamente».
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