El movimiento conocido como Nueva Fuerza de Izquierda, encabezado por el ex candidato presidencial Jorge Arrate, convocó este miércoles a un encuentro nacional programático que se realizará este sábado y domingo próximos en la Universidad de Santiago de Chile (Usach).
Además, aprovecharon de plegar su adhesión a las movilizaciones programadas para el 21 de mayo, día en que el Presidente Sebastián Piñera dará su cuenta pública y para el que se manifestarán diversos grupos sociales en contra del megaproyecto Hidroaysén y a favor de las más recientes demandas estudiantiles.
«Este encuentro nacional culmina un trabajo muy largo que apunta a constituir una fuerza que agrupe a organismos, entidades, agrupamientos políticos y también a dirigencias sociales y a personas en un nivel de convivencia política que les otorgue igualdad de derechos», explicó Arrate.
En la ocasión, el dirigente de la FECH Cristóbal Lagos, llamó a participar de las movilizaciones estudiantiles tanto de las instancias que articulen nuevas fuerzas políticas.
«La política se trata de estar en la calle, peleando por los derechos sociales que le corresponden a toda la sociedad, pero también estar haciendo esfuerzos por agrupar gente que piense lo mismo, que está en el mismo camino y que quiere construir un país distinto», dijo.
Al mismo tiempo, el ecologista Eduardo Giesen reiteró las críticas hacia el modelo impuesto por el megaproyecto Hidroaysén, en cuanto a «los grandes intereses privados» que rigen la iniciativa, convocando a la participación en las protestas a la una «izquierda moderna vinculada a los movimientos sociales».
«Convocamos a la ciudadanía a pensar una manera distinta de construir el modelo energético, pero también el desarrollo de este país, y creemos que la manera más justa y sustentable es desde la izquierda», manifestó.
Y, por otra parte el presidente de la Comisión Chilena de Derechos Humanos, Gonzalo Taborga, propuso una reflexión a nivel nacional sobre un cambio basado en el respeto a los DD.HH., llamando también a configurar «el tercio que falta en la política nacional», refiriéndose a la izquierda.
Según Taborga, hay una «necesidad de levantar una alternativa que sea antisistémica, que luche por una nueva configuración del Estado, centrada principalmente en el principio de la autodeterminación del pueblo».
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