Senadores de oposición instaron al Gobierno a promover medidas en apoyo internacional a Somalia, país africano que se encuentra en una grave crisis humanitaria, con más millones de habitantes que sufren malnutrición.
Los parlamentarios Alejandro Navarro (MAS), Pedro Muñoz (PS) y Jaime Quintana (PPD), solicitaron al Ejecutivo que impulse medidas ante la ONU y otros foros internacionales para ir en ayuda.
Los legisladores señalaron que la iniciativa, que deberá ser sometida al pronunciamiento de la Sala del Senado, se fundamenta en que la ONU declaró oficialmente, el pasado 20 de julio, el estado de hambruna en dos regiones del sur de Somalia, Bakool y Baja Shabelle, en África, y pidió a la comunidad internacional 300 millones de dólares para poder salvar vidas.
Explicaron que de acuerdo al coordinador de Asuntos Humanitarios de la ONU para Somalia, Mark Bowden: «cada día que nos retrasemos en prestar asistencia es, literalmente, cuestión de vida o muerte para los niños y sus familias en las áreas afectadas por la hambruna».
Los senadores aseveraron que casi la mitad de la población somalí, unos 3,7 millones de personas, está en una situación de crisis humanitaria, de los cuales 2,8 millones residen en el sur, según indican los datos de la ONU.
Cabe señalar que una hambruna se declara técnicamente cuando se combinan las siguientes variables: el índice de malnutrición aguda entre los niños supera el 30%, más de dos personas -por cada 10.000 habitantes- mueren al día y la gente carece de acceso a alimentos y otras necesidades básicas.
En Somalia los índices de malnutrición son actualmente los más altos del mundo, y en algunas zonas de Bakool y Baja Shabelle se registran más de seis muertes diarias, por cada 10.000 habitantes, de niños menores de cinco años.
A esto hay que agregar que las áreas más afectadas del sur de Somalia albergan a unos 310.000 niños que sufren malnutrición aguda, en la peor crisis alimentaria de África desde la hambruna que golpeó a ese país entre 1991 y 1992.
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