La Concertación dio a conocer este miércoles el nuevo enfoque del conglomerado, luego que los presidentes de los partidos acordaran desarrollar un trabajo de coordinación en este sentido para enfrentar la crisis interna que se generó al interior del bloque opositor.
El anuncio que coincide con el aniversario del triunfo del «No», en octubre de 1988, sirvió para que el pacto del «arcoiris» se relanzara enfocado en la conformación de una «nueva mayoría social y política».
El coordinador del proceso de conversaciones y renovación; y presidente del Partido Socialista (PS), Osvaldo Andrade, fue el encargado de leer el documento «Nuestro Compromiso» en el que la coalición declaró su voluntad de la conformación de una nueva mayoría «para cambiar Chile».
«No sabemos la forma concreta y precisa que adoptará la coalición que en definitiva encarne esta voluntad mayoritaria y de Gobierno. Hay un legítimo debate entre nosotros respecto de cómo se construirá», dijo.
El timonel PS detalló que este será un proceso que se debe hacer con «generosidad, sobre la base del diálogo sin vetos y una agenda sin exclusiones», añadiendo que aunando voluntades permitirá recuperar la confianza perdida «de miles de chilenos y chilenas que ven con estupor cómo el gobierno de la derecha echa por tierra los sueños de mayor participación y cambios en la sociedad».
En ese sentido, llamó a aportar sustantivamente a una oposición «con personalidad, con entidad, que se exprese frente a un gobierno de derecha, en defensa de los ciudadanos y sus derechos», además de convocar a la participación activa de la generación sub 40 en la actividad ciudadana.
Para esto se propuso la realización de un Foro Democrático; una instancia amplia que incluirá a actores políticos y sociales «para debatir y definir la agenda de la oposición y una metodología de trabajo conjunta».
COMPROMISOS Y GRANDES REFORMAS
Andrade además detalló que en el norte de la Concertación se encuentran tres grandes ámbitos de reformas, que apuntan una nueva Constitución, un acuerdo social para terminar con las desigualdades y los abusos; y una nueva definición del desarrollo, que sea más inclusivo.
En ese sentido manifestaron su compromiso a favor de cambios democráticos que den más participación ciudadana, su respaldo al movimiento estudiantil, y el impulso «desde ya de las reformas que queremos».
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