Los senadores de la comisión de Salud, Mariano Ruiz-Esquide (DC) y Francisco Chahuán (RN), manifestaron su preocupación por la situación del hospital de niños Exequiel González Cortés y el Instituto Nacional del Cáncer, que son los únicos recintos de alta complejidad y de especialidad que cuentan con la acreditación que certifica la calidad de sus prestaciones y atenciones.
Por esta razón, los senadores llamaron a evitar un despilfarro de recursos. Ruiz-Esquide, por su parte señaló que el tema debe solucionarse a la brevedad, junto con impulsar una reforma de salud a fondo.
La acreditación de recintos asistenciales, que impulsa la superintendencia de Salud, pretende fijar estándares mínimos en los procesos y procedimientos de los recintos asistencias, con miras a la entrada en vigencia de la garantía Auge de la calidad, que es la única que falta.
El 1 de julio de 2013 es la fecha de entrada en vigencia para esta última parte del plan garantizado, que obligará a partir de esa fecha a que todos los recintos que quieran resolver patologías garantizadas deban acreditar sus procesos.
Al respecto, el senador Ruiz-Esquide manifestó que en la Comisión de Salud de la Cámara Alta se ha insistido en que no sólo los hospitales deben estar acreditados, sino que también los recintos privados y las carreras del área de la salud.
Por esto, calificó como fundamental la necesidad de contar con más recursos, la existencia de acreditación de los recintos públicos y privados, y la imposibilidad de que universidades instalen campos clínicos si acaso no acreditan la entrega de prestaciones de calidad.
En tanto, el senador Chahuán manifestó que «estamos profundamente preocupados porque los hospitales públicos no cuentan con los elementos básicos para poder cumplir con las garantías Auge y en ese sentido hacemos el llamado al Ministerio de Salud para los efectos de poder dotar de recursos, tanto humanos, técnicos y económicos que permitan subsanar esos requerimientos».
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