El diputado Iván Moreira (UDI) valoró la decisión del Gobierno de elevar a carácter de «discusión inmediata» en el Senado la tramitación del proyecto de ley que aumenta las sanciones para conductores ebrios.
La decisión del Ejecutivo fue confirmada el viernes por el ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, luego de reiteradas quejas por parte de parlamentarios, incluido Moreira, frente a la lentitud en la aprobación de la propuesta en la cámara alta.
Moreira dijo recordó que el proyecto ya fue aprobado la Comisión de Transportes de la cámara alta, el pasado 12 de octubre, y desde esa fecha no ha tenido ningún avance, hecho que atribuyó a «egos personales de algunos parlamentarios, que estaban preocupados por la autoría de la iniciativa legal».
Moreira emplazó a los legisladores de la cámara alta a acelerar tramitación de la iniciativa, particularmente por el incremento de las cifras de accidentes de tránsito provocados por conductores en estado de ebriedad.
El parlamentario del gremialismo valoró el hecho de que la iniciativa que busca elevar las sanciones a quienes conduzcan vehículos motorizados bajo la influencia del alcohol o estupefacientes, ha sido concebida con carácter de «tolerancia cero».
«Estos significa que quien conduzca no podrá tomar ni siquiera una copa de vino, tampoco una cerveza», señaló.
Moreira explicó además que la iniciativa distingue entre quienes conducen bajo la influencia del alcohol o en estado de ebriedad, y establece sanciones más rigurosas, con el aumento de multas, sanciones y la suspensión a perpetuidad de la licencia de conducir, en el caso de los reincidentes.
El llamado de los parlamentarios que han respaldado el proyecto encontró buena acogida en el Ejecutivo y también en el presidente del Senado, Guido Girardi, por lo que se espera sea finalmente aprobado antes de que finalice este año.
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