Tras los alegatos realizados este sábado ante la Corte de Apelaciones de Talca, el Ministerio Público logró acreditar que tres sujetos detenidos por tráfico de drogas son un peligro para la sociedad y quedaron en prisión preventiva, revocando así la resolución de Juzgado de Garantía de Curicó que había denegado la reclusión.
Se trata de Francisco Lagos, de 23 años, Víctor Ramos y José Guerreo, ambos de 19, quienes fueron detenidos por el OS-7 de Carabineros de Talca en el sector de Potrero Grande, en la precordillera de Curicó, cuando custodiaban poco más de seis mil plantas de marihuana y portando armas de fuego.
El abogado y vocero de la fiscalía regional, Roberto Navarro, dijo que «los principales argumentos presentados por la fiscalía dicen relación con que la libertad de los imputados constituye un peligro para la seguridad de la sociedad, esto fundado en la grave penalidad que estos delitos llevan involucrados. Ellos fueron formalizados no solo por el cultivo y tráfico de drogas sino que además por la posesión de armas. De modo que estamos en presencia de delitos que tienen pena de crimen. De esta forma la Corte de apelaciones acogió los fundamentos del Ministerio Público en virtud de los cuales modificó la resolución del Juzgado de Curicó y por tanto los imputados hoy se encuentran sujetos a la medida cautelar de prisión preventiva».
La defensa de los imputados, en su alegato manifestó que ellos sólo eran trabajadores agrícolas y que estaban al cuidado del campo donde Carabineros ubicó cuatro plantaciones de la droga. Un argumento que fue rebatido por el abogado Navarro, acogiendo finalmente el tribunal la tesis del ente persecutor.
Los imputados resguardaban 6.312 plantas de cannabis sativa, mantenían en su poder un total de 13 kilos del alucinógeno ya elaborado y tres armas de fuego. Con el fallo, ellos continuarán tras las rejas por lo menos durante los próximos cinco meses, tiempo fijado por el tribunal de primera instancia para el plazo de investigación.
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