Un análisis sobre la necesidad de contar con una política de Estado sobre los incentivos para las zonas extremas, realizaron las comisiones unidas de Hacienda y Especial de Zonas Extremas, del Senado.
Ello, en el marco de la tramitación del proyecto que apunta a generar un marco de mayor estabilidad para los instrumentos contenidos en las leyes 19.853, 19.606 y 19.420, y en el D. F.L. N° 15, de 1981, del Ministerio de Hacienda. Así como el perfeccionamiento y ampliación de las medidas de estímulo, con lo que se pretende beneficiar a más inversionistas y contribuir al desarrollo de un mayor número de proyectos de inversión en las zonas extremas.
Los senadores Carlos Bianchi (IND), José García Ruminot (RN) y Pedro Muñoz Aburto (PS) confirmaron que iniciaron una discusión sobre la necesidad de mantener estos incentivos pero abordaron con el Ejecutivo la necesidad de ampliar su ámbito de acción.
El senador Bianchi, presidente de la Comisión de Zonas Extremas, lamentó que “el Ejecutivo no demuestre entusiasmo por perfeccionar los instrumentos de incentivo a las zonas extremas que llevan 30 años de vigencia sin revisión”.
Asimismo, afirmó que “creemos que falta visión de Estado y lamentamos que el Presidente de la República no tenga esa visión estratégica sobre las regiones extremas, sus necesidades y características distintas”.
A su vez, el senador García Ruminot, presidente de la Comisión de Hacienda, explicó que “en lo fundamental, el proyecto establece y extiende determinados beneficios a zonas extremas, particularmente en lo referido a la contratación de la mano obra y la inversión en las regiones de Magallanes, de Aysén y de Arica y Parinacota”.
Por su parte, el senador Muñoz estimó que “lamentablemente hemos perdido una gran oportunidad de fijar una política de Estado para las zonas extremas. Solo nos estamos preocupando de renovar instrumentos legales que no hemos medido”.
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