Su pleno respaldo a las demandas que están solicitando los trabajadores del diario La Nación entregaron los diputados independientes, Pedro Araya y Alejandra Sepúlveda, llamando al futuro gobierno a pronunciarse sobre la situación del medio cuyo 69,25% de participación estatal será licitado el 16 de enero.
«Nosotros damos nuestro apoyo a estos hombres y mujeres que están en una completa incertidumbre respecto a su futuro laboral. Creemos que es impresentable que se quiera terminar con este medio de comunicación», sostuvieron los parlamentarios.
En ese sentido, llamaron al Presidente Sebastián Piñera, a terminar con el proceso de licitación. «No podemos seguir con la concentración de la prensa, encerrando el pluralismo y no dando el espacio que corresponde a la libertad de expresión», dijeron.
«No se puede acabar con un medio estatal y de gran utilidad para la ciudadanía, por lo mismo esperamos que este gobierno recapacite en ese sentido», manifestaron Araya y Sepúlveda.
Además, ambos legisladores llamaron a la Presidente electa Michelle Bachelet a tener un compromiso real y contundente con los trabajadores de La Nación. «Es indispensable que haya una propuesta del nuevo gobierno, esto para la estabilidad de estos empelados y también para sus familias», argumentaron.
Por su parte, la presidenta del Sindicato de Periodistas de La Nación, Nancy Arancibia, agradeció el apoyo de los parlamentarios independientes y expuso que «la defensa del diario no es sólo para mantener un medio para los trabajadores, sino que es salvar un diario que es patrimonio de la nación con 97 años de antigüedad».
«El proceso de licitación del diario La Nación enajena en términos económicos un bien de todos los chilenos, sin resguardo de la conservación de su archivo, de su memoria como medio de comunicación ni como el registro de la historia de este país. Vender el diario impide cualquier posibilidad de convertir a La Nación en un medio de comunicación público, regulado por un estatuto, autónomo, independiente, con su eje editorial orientado a cumplir con el derecho de información y pluralismo que las sociedades desarrolladas demandan del Estado», sostuvo.
Arancibia recalcó que «esto es un medio al servicio de los ciudadanos y no del gobierno de turno o de un grupo de interés político o económico. También demandamos a la Presidenta electa su pronunciamiento y gestión para evitar que este diario sea vendido y convertido, por ejemplo, en un portal de noticias de un supermercado, un banco o de cualquier grupo económico».
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