Adolescente mexicano crea sostén para detectar cáncer de mama

Fue en el año 2011 cuando la madre de Julián Ríos fue diagnosticada con cáncer de mama por primera vez. Pero antes, le habían encontrado una pequeña mancha en su seno tras una mastografía y le habían asegurado que era beningna. Pero no lo era. Seis meses después el tumor había crecido y ya existía otro. La mujer terminaría con los dos pechos amputados por un mal diagnostico.

Hoy Julián tiene 17 años y es estudiante de preparatoria del Instituto Tecnológico de Monterrey, México. Allí, junto a otros compañeros, fundó Higia Technologies -Higia es el nombre de la diosa griega de la prevención y la salud- una empresa dedicada a crear alternativas tecnológicas para prevenir el cáncer de mama.

Su primera creación es «Eva» un sostén con un software que detecta tumores en los senos y que incluso puede diagnosticar si estos son benignos o malignos y en qué fase están.

¿Cómo lo logra? Eva integra  200 pequeños biosensores capaces de mapear la superficie de la mama y determinar la conductividad térmica por zonas. Luego, a través de diversos algoritmos, compararan cada uno con una base de datos que determina si existe o no cáncer y de qué tipo es.

Para detectar un posible tumor, una mujer necesitaría utilizar entre 60 y 90 minutos el sostén a la semana para el análisis. Y es que en realidad este dispositivo es un parche más que una prenda que se use diariamente. «Tú tomas el dispositivo y lo pones bajo cualquier tipo de brasier. Después tomas tu smartphone, abres nuestra aplicación y comienzas la exploración», explicó el joven a El País.

Eva saldrá a la venta finales de 2017 y tendrá un precio de introducción de casi 70 mil pesos. Ríos recalcó que con esto no busca reemplazar a la mamografía. «Estamos tratando de otorgar herramientas de diagnóstico personales a la mujer y profesionalizar el método autoexplicativo».

Su proyecto ganó el primer lugar del Premio Nacional del Estudiante Emprendedor e irá a representar a su país a la competencia mundial que se realizarán en Frankfurt, Alemania.

Julián Ríos