Yo opino
Esta semana en medio de una entrevista por el juicio de Nabila Rifo, una periodista decidió detener una entrevista a una mujer que consideraba que Nabila Rifo se «buscó» y «merecía» el brutal ataque que recibió en mayo del año pasado.
Esta definición de la periodista fue apoyada y valorada por medios de comunicación y usuarios y usuarias de redes sociales.
Ese rechazo evidente a la justificación de la más cruda expresión del machismo que es la violencia contra las mujeres, nos habla del avance de la transformación cultural de género.
Hace 4 años los casos de violencia, machismo y sexismo eran menos visibles para las ciudadanías. Hoy son parte de las conversaciones de pasillo, los debates de medios y redes sociales y las sobremesas familiares. Hoy avanzamos en transformación cultural.
Tenemos muchos desafíos por delante. Sabemos que imágenes y concepciones sobre las mujeres son profusamente difundidas en los medios de comunicación, sean escritos, radiales o audiovisuales.
El desafío es avanzar hacia un cambio cultural profundo, que valore el aporte de las mujeres en todos los espacios, erradicando la violencia machista y no reproduzca estereotipos que consolidan la desigualdad.
Este es un desafío que hemos asumido como Gobierno, y en ese camino por ejemplo como Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género junto al Ministerio Secretaría General de Gobierno elaboramos una “Guía ilustrada para una comunicación sin estereotipos de género”, que fue dada a conocer en marzo de 2016.
Esta guía explica cómo se debería hacer si queremos construir comunicaciones que promuevan la igualdad entre mujeres y hombres.
En la misma idea, en noviembre del año pasado lanzamos junto al Consejo Nacional de Televisión y la Red de Asistencia a Víctimas de la Subsecretaría de Prevención del Delito, las “Recomendaciones para el tratamiento Mediático a niñas y mujeres víctimas de violencia» las que apuntan a evitar justificar en los mensajes emitidos por los medios, la violencia contra las mujeres.
Acciones como estas contribuyen desde la masividad que nos otorgan los medios al cambio cultural que valore a las mujeres por sus aportes y que fomente una vida sin violencia para todos y todas.
Como sociedad tenemos el desafío de avanzar hacia un cambio cultural que modifique las relaciones entre mujeres y hombres sobre la base del respeto a los derechos humanos.
Como Ministerio estamos a cargo de encabezar las políticas públicas para generar condiciones de igualdad para las mujeres de nuestro país y acortar las brechas de inequidad de género. En esta tarea de cambio cultural de fondo, las comunicaciones son un importante aliada a la hora de abrir caminos.
La invitación es a sumarse al cambio cultural, a ser parte desde nuestros actos y acciones cotidianas, para avanzar hacia un país donde la igualdad de derechos y deberes entre hombres y mujeres esté presente en todos los ámbitos y espacios.
