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Una jueza de Los Ángeles dictó una orden de detención contra el cantante por una millonaria deuda a su ex manager. Esto se suma a otras deudas del cantante y a una serie de errores que viene cometiendo en los últimos años.
El 24 de marzo, una corte de Los Ángeles le dio un ultimátum a Luis Miguel: si no se presentaba el 17 de abril ante la audiencia programada por el caso de su ex manager, procederían con la orden de detención. Y así fue. Este lunes, el Sol de México no se presentó y la Justicia ahora hace lo suyo.
«La juez emitió una orden de arresto contra Luis Miguel por violar una orden judicial», dijo la abogada del ex manager, Amy B. Messigian, quien explicó a Univisión que era la tercera ocasión que el cantante había sido llamado ante el tribunal para responder, sin que él hiciera acto de presencia.
Todo comenzó el 2011, cuando el cantante le pidió al empresario texano William Brockhaus que fuera su representante por la amistad que tenía con su esposa, Michelle Salom, amiga de Luis Miguel desde la infancia.
Bockhaus creó la firma WB Music Management para representar al cantante y dirigió desde ahí sus negocios y presentaciones hasta 2014. En ese año, su relación se quebró porque, según el ex manager, Luis Miguel no le pagó los honorarios que le había prometido por contrato.
Esta deuda, según la demanda, asciende a 1.043.483 dólares (algo más de 675 millones de pesos).
Después de dos años de batallas legales en Estados Unidos, una juez del estado de California concluyó el pasado 27 de enero que le debía ser embargado su vehículo Rolls Royce negro, del año 2013, para saldar la deuda, según la sentencia a la que ha tenido acceso el diario El País. La semana pasada Luis Miguel aparecía, no obstante, conduciendo ese mismo coche por una de las calles más exclusivas de Los Ángeles junto a una atractiva mujer, informa el mismo medio.
Y si bien la detención parece poco probable, la emisión de la orden viene a sumarse a una larga lista de batallas legales y errores que ha enfrentado el artista desde que dejara de cantar hace dos años.
Desde el 2015 que las cancelaciones de conciertos y giras, y varios incumplimiento de contratos le han costado a Luis Miguel demandas millonarias que aún tiene que enfrentar ahora.
En total, Luis Miguel acumula por lo menos 13 millones de dólares en deudas (8.426 millones de pesos). Con su propia discográfica tiene un proceso abierto por una deuda de casi cuatro millones de dólares, según informa El País. En el documento, fechado el 8 de marzo de este año y elaborado por un juzgado de Los Ángeles, el artista reconoce que tiene un pago pendiente desde 2014 y que llegó a un acuerdo para dilatar la fecha del pago hasta el 30 de noviembre de 2015. Sin embargo, este nunca se produjo y se ve obligado a asumir la demanda de la multinacional.
Y a esta se suma otra de al menos siete millones que le pide el cantante Alejandro Fernández por una gira conjunta que no se realizó y que se había acordado en noviembre de 2015. La idea era que ambos se subieran a las tablas juntos entre abril y noviembre de 2016, con 50 eventos programados en México, Centroamérica y Estados Unidos. Luis Miguel exigió el pago anticipado de parte de las ganancias y cuando canceló la gira, nunca devolvió el dinero. Ahora Fernández exige una indemnización, además del reintegro.
