Publicidad
El autocultivo de marihuana avanza en el Parlamento: “Que nunca más una madre sienta temor de perder la medicina de su hijo” Proyecto busca que receta médica funcione como único permiso

El autocultivo de marihuana avanza en el Parlamento: “Que nunca más una madre sienta temor de perder la medicina de su hijo”

Paulina Bobadilla, directora de Mamá Cultiva, junto a otras familias y activistas, celebran que la moción presentada por la diputada Karol Cariola esté cada vez más cerca. La receta debe especificar el diagnóstico del paciente, el tratamiento y la forma de administración, la que “en ningún caso podrá ser mediante combustión”.


Paulina Bobadilla es mamá de Javiera, una niña que desde los 8 meses está diagnosticada con esclerosis tuberosa y epilepsia refractaria. Desde ese entonces, hasta los 5 años, fue medicada con una batería de fármacos.

“Mi hija era un pequeño ser, sin vida, sólo había oscuridad en nuestros días. El cannabis me permitió conocer a esa hija que la medicina tradicional me había arrebatado. Javiera volvió a sonreír y disfrutar de los días de sol. Para nosotras, cannabis es vida”, cuenta la directora de Mamá Cultiva, una de las madres que celebra el importante paso que se dio ayer, cuando la Cámara aprobó que la receta médica funcione como permiso para el autocultivo de marihuana, dejando a muchas familias más cerca de alcanzar la larga lucha que han dado y a la Fundación Daya a pocos pasos de lograr la que han llamado Ley Cultivo Seguro.

“Estamos felices, esperamos que prime la sensatez en el Senado y pronto sea Ley de la República, para que nunca más una madre sienta temor de perder la medicina de su hijo”, dijo Bobadilla. Y luego agregó: “Estamos agradecidos de la planta, porque cambió la vida de toda la familia; no solamente de la Javiera”.

El proyecto de ley valida la receta médica como permiso para la tenencia y cultivo de plantas de marihuana, con fines terapéuticos, en los hogares. La moción de la diputada Karol Cariola (PC) plantea una modificación al Código Sanitario, para regular “la fabricación de productos derivados de especies, subespecies y variedades del género cannabis, destinados a la atención de un tratamiento médico”. Para ello, las terapias elaboradas en base a marihuana deberán ser prescritas por un médico, a través de una receta que especifique el diagnóstico del paciente, el tratamiento y la forma de administración, la que “en ningún caso podrá ser mediante combustión”.

Los pacientes quedarán autorizados para la siembra, cultivo y cosecha de plantas de marihuana, sin arriesgar las penas de presidio que establece la ley 20.000 en su artículo 8, el que sanciona el tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias sicotrópicas. La receta médica debe detallar la dosis, la duración del tratamiento y corresponder a alguna de las enfermedades susceptibles de ser tratadas con productos cannábicos.

Publicidad

Tendencias