Este sábado se presentan en el estadio Víctor Jara dos representantes de la ola de sonidos cubanos que azota al mundo por estos días. Los artistas, acompañados por una banda de seis músicos, interpretarán temas del primer trabajo solista de Barbarito Torres junto con los conocidos éxitos del álbum Buena Vista Social Club.
Como una "hermandad" definen Barbarito Torres y Pío Leyva al grupo de octogenarios intépretes de bolero y son cubano que desde hace un par de años son grito y plata en todo el mundo. Y sin duda este concepto es el que mejor define a este conglomerado de artistas reunidos en torno al fénomeno del disco Buena Vista Social Club.
"Son músicos que siempre han trabajado juntos en diferentes proyectos. Los une también una fuerte amistad. Se llaman para colaborar cuando alguno va a grabar un disco", explica Sonia Pérez Casola, una de las vocalistas de la banda que acompaña a los músicos.
Pío Leyva (83 años) y Torres (44, algo así como el benjamín del grupo) son los primeros integrantes de esta veterana camada que empezará a aterrizar en el país. En octubre será el turno de Compay Segundo y en noviembre actuarán los rostros tal vez más visibles del proyecto Buena Vista Social Club: Omara Portuondo e Ibrahim Ferrer.
Barbarito Torres, conocido como el "Jimi Hendrix del laúd" por su maestría en la interpretación de este instrumento, presentará, en la que es su segunda visita al país, su primer trabajo como solista, Habana Café. Torres estuvo en Chile a principios de la década del 70, época en que compartió con artistas como
Quilapayún, Inti Illimani y Víctor Jara, de quien guarda especiales recuerdos.
"El suceso alrededor de nosotros ha sido tan grande que aún no termino de convencerme: que un disco de música tradicional grabado con el sonido de los años 40 tuviera ese impacto, me resulta increíble", reflexiona volviendo al tema del boom de estos sonidos caribeños.
Los músicos reconocen no entrar en mayores complicaciones ideológicas ni musicales tras grabar con una multinacional y bajo la supervisión de un productor norteamericano: "Por los problemas económicos que hay en el país, no podemos dedicarnos a promocionar un disco con esta cantidad de apoyo. Este éxito abrió la posibilidad de que casi todos los integrantes de Buena Vista ahora tengan trabajo. Además la promoción del disco ayudó mucho a que la música cubana penetrara en mercados en que inicialmente no era tan conocida", comentan.
Ante la posibilidad de volver a reunir a todos los integrantes , que hoy por hoy se pasean por el mundo al ritmo de sones, boleros, guarachas y guajiras, Barbarito Torres abre una esperanza: "Tengo entendido que el Instituto de la Música cubana quiere reunirnos a todos en el próximo Festival del Son e inaugurar el festival con nosotros. Quién sabe".
