A fines de agosto se presentará por primera vez en Chile un conjunto de música tradicional vietnamita. El grupo traerá música, danzas, vestimentas y lugares de un pueblo que ha podido conservar su identidad pese al tiempo y a las constantes invasiones. Los chilenos podrán escuchar el sonido del Dan Bau, instrumento no recomendado para las mujeres jóvenes por la sensualidad de su sonido.
El sonido del bambú de Vietnam llegará al país con sus prácticas rituales y sensuales. El encanto del Dan bau, instrumento en que vive la Madre del Arroz, la expresión de rituales y el arcaico aliento de las melodías de un pueblo que considera a la música como una necesidad esencial, son algunos de los elementos que traerá un grupo de artistas de ese país en su primera visita a Chile.
El grupo de profesores y creadores del Conservatorio de Hanoi y la Academia de Danzas de Vietnam que arribará a Sud América, presentará un espectáculo que incluye la interpretación en instrumentos musicales tradicionales, lo que será complementado con danzas representativas de los 54 grupos étnicos que existen en Vietnam.
Los orígenes musicales
Cuenta la leyenda que el pueblo proviene de Lac Long Quan, hijo del Dragón que por sus victorias sobre numerosos monstruos acuáticos se casó con la Hada Au Co. De tal unión conyugal vino al mundo una bolsa que contenía 100 huevos, que se convirtieron luego en 100 niños, 50 se fueron con el padre hacia el mar y los 50 restantes se quedaron en las regiones montañosas con su madre. El mayor se auto-proclamó el rey del país adoptando como nombre el de Hung Vuong e instituyó al país con el nombre de Van Lang, el actual Vietnam.
Vietnam culturalmente posee influencias provenientes de la China y la India. A través de tiempo han incorporado en sus costumbres las canciones que animan sus trabajos, educan a sus niños y practican en festividades y rituales. Todo esto llegó a constituir un repertorio tradicional bastante amplio, en especial en cuanto a los diversos géneros que cultivan, los que se gestaron durante los distintos periodos de la historia y en las 54 etnias que comparten las regiones cordilleranas del territorio. Con el transcurso de los años crearon melodías y dieron nuevas expresiones a canciones que eran parte de un mismo género lo que enriqueció aún más sus manifestaciones.
El repertorio que ejecutan incluye canciones, arrullos, melodías rituales, creaciones para el trabajo, de cortejo, de enigma, y de vuelo poético, que han ido construyendo la música tradicional del pueblo en una gama variada de géneros y entonaciones entre una etnia y otra.
Al igual que en otros países de Asia, la música tradicional vietnamita no es escrita sino que se transmite oralmente de una generación a otra.
Entre los géneros que cultivan destacan el Cheo (ópera tradicional que se lleva a cabo con payasos), Tuong (drama clásica que se inició en el siglo XVII y ahora se representa en la parte sur del centro del país), Quan ho (canción folklórica), Ca tru (canción declamativa), canción Hue, cai luong (teatro renovado), Hat doi (canción folklórica alternativa), Ho (gritos), instrumentos como Dan Bau (una cuerda), Dan to rung (tubos de bambú) y Dan da (instrumento de piedra.
Si bien cada minoría tiene sus propias danzas, las más auténticas son las de los Thai y meo, así como del Cheo y la de los habitantes de la altiplanicie Tay nguyen.
Para ir directo al corazón
La variedad instrumental va desde cítaras de una cuerda hasta piezas de variados tubos de bambú. Los instrumentos se asocian a la vida espiritual de las minorías étnicas de las regiones montañosas son creados para mujeres exclusivamente.
La mayor parte de ellos son creados en bambú (recurso abundante en esas regiones) y al ejecutarlos emiten sonidos delicados, evocadores y asombrosamente sencillos, como el de la flauta Sao, el K´long put, el violín monocorde Lan dóc huyen y la cítara vietnamita. Estas piezas se han conservado hasta hoy pasando a ser parte de un rico tesoro de esa cultura.
La cítara de una cuerda llamada Dan bau, debe ser ejecutada sólo por placer para el músico. Produce tal fascinación que se ha llegado a decir que una mujer joven no debe escucharlo por la sensualidad de su sonido. Es sus inicios fue un instrumento sencillo, hecho de un trozo de bambú, una vara flexible y una calabaza, pero con el tiempo se hizo más complejo, llegó a tener un clavijero para afinarlo, una cuerda de metal atada a éste y un puntero de bambú o ratán con el cual se percute la cuerda. Produce un sonido dulce y cautivador y usa únicamente para acompañar una narración poética.
Según las entalladuras antiguas el laúd -con forma de luna- apareció en Vietnam en el siglo XI. Fue ideado para que lo tocaran sólo los hombres y se ha mantenido en las tradiciones musicales del Kinh.
El llamado Pi dan nguyet posee un sonido puro y fuerte que conforma parte de los rituales solemnes, animados, entierros y conciertos de cámara. Por su belleza de cuello largo y traste altos se usa también de adorno.
Uno de los instrumentos más populares por su connotación espiritual y majestuosa es el T’rung de las regiones montañosas centrales. Está hecho de tubos de bambú, cortos pero de distintos tamaños, con un corte a un extremo y un borde biselado al otro. Los tubos grandes y largos dan los tonos bajos, mientras que los pequeños dan los más altos. Los tubos se colocan a lo largo horizontalmente y se atan, entre ellos, por dos cuerdas. Tradicionalmente se ejecuta después del trabajo, alrededor de una hoguera, en matrimonios y fiestas del pueblo, mezclándolo con sonidos del gong.
Otro instrumento conocido es el K’long put. Se construye con varios tubos de bambú y fue ideado para las mujeres. Se dice que dentro de este reside la «Madre del Arroz» y por eso se ejecuta en diversas festividades de la producción agrícola y para dar la bienvenida al Año Nuevo.
Y cuando en Vietnam quieren emocionar a una muchacha muestran sus pasiones a través del H’mong o Sao, flautas individuales o dobles, con o sin caña, con o sin agujeros, que produce sonidos como los susurros que, según se dice son los predilectos del corazón.
Los músicos vietnamitas llegarán como parte de una visita cultural organizada por el Instituto Chileno-Vietnamita de Cultura y la Embajada de Vietnam, ubicada en Argentina y concurrente en Chile. Actuarán el día miércoles 29, a las 19.30 hrs., en el Teatro de la Universidad de Chile. Las entradas se están vendiendo por el sistema de Ticket Master en todos los locales de la Feria del disco y en la boletería del teatro, ubicado en Plaza Italia. Los precios de las entradas son de $3.000, $4.000 y $8.000.
