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Celia Cruz regresa a los escenarios a ritmo de «rap»

Con su último disco, La negra tiene tumbao, la cubana Celia Cruz volvió a demostrar su capacidad para fusionar su sonido predilecto, la salsa, con otros ritmos más actuales como el «rup», un acto que intenta reagrupar a las nuevas generaciones entorno a su música.


La reina de la salsa, Celia Cruz, volvió a sorprender a sus seguidores al debutar, en su producción discográfica número 79, La negra tiene tumbao, en el género del «rap» y según declaró hoy la cantante, con ello busca atraer también a las nuevas generaciones.



Sin embargo, recuerda que no es la primera vez que se atreve a dar un paso novedoso ya que en la década de 1950 grabó rock con La Sonora Matancera y «bogaloo», cuando este estuvo de moda.



La negra tiene tumbao, que salió al mercado el 6 de noviembre, es el segundo que graba para la multinacional Sony, y se compone de diez temas en que combina diversos géneros musicales con la salsa.



Y es precisamente el tema que le da título al disco en el que se escucha a la artista en este género, que se popularizó entre los jóvenes, y al que la artista le imparte su «azúcar».



Con la jovialidad que la caracteriza, la guarachera asegura que se decidió por un rap «porque dicen que el no cambia se estanca y que hay que echar para adelante».



«El rap, sobre todo aquí (en EEUU), está bastante aceptado y hay muchos raperos. La única que no hace rap soy yo», afirmó.



En este tema participa el músico puertorriqueño Mikey Perfecto, quien aporta fragmentos de rap, que son intercalados entre los de la salsera.



«Hay muchos raperos, así que dije, déjame entrar en la onda porque yo nunca he dejado de hacerlo. Cuando el rock and roll vino, yo canté mi rock y cuando el bogaloo vino, también lo canté», señaló. «Entonces me dije, por qué no hacer, lo con el rap, que aunque no tiene ritmo, tiene melodía», indicó y explicó que en este álbum sólo incluyó este tema de fusión de ritmos.



Innumerables colaboradores en su último trabajo



El productor del número es el conocido Sergio George pero el tema fue grabado por separado, algo que la artista lamenta porque, a pesar de que la tecnología permite este tipo de adelantos, a su vez no facilita compartir el momento con sus artistas invitados.



Todos los temas del disco fueron seleccionados por Celia Cruz «y son números que nadie ha cantado, que es lo más importante para mí».



Cruz reiteró que ella prefiere grabar números inéditos, «y yo no creo que esté en mis finales, voy a seguir cantando hasta que Dios quiera y no pienso retirar (…) Y sigo con la idea de que siempre puedo seguir creando y seguir siendo única en el género que cultivo con respecto a los números», argumentó.



El álbum fue producido por Sergio Sergio, Isidro Infante y su amigo de muchos años de escenarios, Johnny Pacheco.



«Aunque no es la primera vez que trabajo con ellos, siempre es una oportunidad muy especial revivir bonitas experiencias musicales con estos tres genios», afirmó.



Además del tema que da título al disco, George produjo Pa Arriba no va y Taita Bilonga junto a Ramón Sánchez.



En Tararea Kumbayea, el maestro dominicano Pacheco comparte el arreglo con el pianista Papo Luca, en lo que significó una reunión de viejos a
migos, ya que la salsera compartió con ambos en las Estrellas de Fania.



Otro maestro de la música tropical que intervino en los arreglos es el bajista Bobby Valentín, quien trabajó junto a Pacheco en Déjame Vivir.

Por su parte, Isidro Infante fue el responsable de los arreglos en Volver a empezar y Sin clave no hay son.



»No es la primera vez que hago algo diferente»



«Mis discos siempre son alegres», comenta para agregar que «me encanta Taita Bilongo porque menciona varios temas que yo cantaba y el nombre de mi mamá».
«Una de las cosas que me llevó a hacer este número fue por eso, por mi mamá Catalina», agrega.



Celia Cruz se manifiesta complacida con su nuevo proyecto, del que señala «está muy actualizado» pero acto seguido comenta que «tengo muy buenos discos, entre estos, los de La Sonora Matancera.



La artista afirma que no se opone a la fusión de ritmos en la salsa, algo que otros intérpretes de este género rechazan.



«El que no cambia se estanca y yo no me quiero estancar, quiero seguir en esto. Yo no lo veo mal (la fusión) que se haga eso», dijo la cantante, quien añadió «no es la primera vez que hago algo diferente, pero ahora es que se están fijando en estas cosas».



EFE

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