El Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2002 volverá a actuar en París con su orquesta, la New Orleans Jazz Band, por primera vez tras seis años de ausencia musical, consciente de que la gente acudirá al teatro «más para verme que para escucharme».
Cinéfilos, mitómanos y amantes del jazz se preparan para ver y escuchar esta noche en el Teatro de los Campos Elíseos al clarinetista aficionado y reconocido cineasta estadounidense Woody Allen.
El Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2002 volverá a actuar en París con su orquesta, la New Orleans Jazz Band, por primera vez tras seis años de ausencia musical, consciente de que la gente acudirá al teatro «más para verme que para escucharme».
«Si no fuese célebre no tendrían ninguna verdadera razón de venir a mis conciertos», recuerda el cineasta, que si bien se define como un puro aficionado, asegura que los músicos que le acompañan «son todos profesionales reconocidos» y «excelentes» instrumentistas.
Entre los invitados especiales de las dos únicas actuaciones parisienses del autor de «Alice», famosos franceses como Roman Polanski, Bertrand Tavernier, Juliette Binoche y Antoine de Caunes se darán cita en el patio de butacas.
Allen -que «si tuviese que volver a vivir querría ser pianista», según confió al semanario «L’Expres»- prefiere, no obstante, que ningún gran músico esté en la sala cuando toque su clarinete, pues cuando es el caso y él lo detecta, tiende a «licuarse».
«Imposible esperar auxilio. No soy siempre el dueño de mis emociones», añade este artista que el pasado día 27 actuó en Roma, donde también presentó su última película, «Hollywood Ending».
Nuevo filme
La primera vez que Woody Allen, amante del jazz más tradicional, cambió con su banda los lunes neoyorquinos por un concierto en París fue en 1996, cuando dejaron sonar su quejido de Nueva Orleans en el Olympia.
Mítica sala en la que el ídolo del Allen adolescente, Sydney Bechet, grabó el primer disco de jazz que escuchó el entonces futuro cineasta y que le hizo comenzar a entrenarse con el saxofón a los 13 ó 14 años y luego con el clarinete.
La próxima visita del cineasta, celebrado de manera particular este año en Oviedo, donde acaba de recoger el Príncipe de Asturias en homenaje a toda su carrera, y el pasado mayo en el Festival de Cannes (sureste de Francia), será para presentar su nuevo filme, «Anything Else», en marzo de 2003.
EFE
