Por primera vez en su carrera, la banda californiana de punk rock, The Offspring aparece con un grandes éxitos que aúna temas tan reconocibles como Come out play, All it want, Selg estefeem, Hit that, Pretty fly o The kids aren´t alright (además de Can´t repeat, una canción inédita). Veinte años de trayectoria compilados en un solo disco. Este es su Greatest Hits.
Tras abandonar en 1984 una pequeña banda llamada Manic Subcidal, Dexter Holland (voz y guitarra) y Greg Kiegel (bajo), se unen a "Noedles" Kevin Wasserman (guitarra) y Ron Welty (batería) para formar lo que sería The Offspring. Ya en el ’87 lograron sacar su primer sencillo, pero como no tenían el apoyo de alguna casa discográfica, el dinero para financiarlo debió salir de sus bolsillos.
Sin embargo, dos años más tarde, el pequeño sello Nemesis (especializado en bandas punk) se interesa en The Offspring y les financia su primer álbum homónimo. Sin bien, este debut no logra un gran éxito comercial, les permite darse a conocer dentro de la movida "punkie" californiana, despertando así el interés de Epith Records.
En 1992 editarían su segunda placa denominada, Ignition. Con doce pujantes y pegajosas canciones al mejor estilo de punk rock que comenzaban a forjar, el disco se trasformaría en la antesala de la "bomba"que se avecinaba. En 1994 reaparecen con Smash, uno de los trabajos discográficos más vendidos de todos los tiempos y la placa que los lanzaría a la fama.
La intensidad característica del punk, algunas dosis de rock y un sello que lograron impregnar en sus canciones, hicieron de la banda norteamericana el delirio de millones de fans por el mundo. Álbumes como Ixnay on the hombre (1997), Americana (1998), Conspiracy of one (2000) o Splinter (2003), afianzarían y consolidarían una y otra vez un fenómeno que no se detenía.
A dos años de su último trabajo discográfico, y con más de 30 millones de placas vendidas en todo el mundo, los californianos The Offspring regresan a deleitar a sus incondicionales fans. Y lo hacen de la mejor forma: con un recopilatorio (por primera vez en su carrera) que incluye sus éxitos más destacados como Come out play, All it want, Selg estefeem, Hit that, Pretty fly o The kids aren´t alright (además de Can´t repeat, una canción inédita).
Indiscutiblemente Greatest Hits aparece como un disco necesario dentro de la discografía de The Offspring (sobre todo para sus incondicionales fans), en donde los éxitos se han sucedido álbumes tras álbumes. Si bien, se extrañan algunas canciones de su placa debut homónima o de Ignition, este recopilatorio logra aunar lo más exitoso de la banda.
El álbum abre con el interesante tema inédito Can´t repeat, para luego dar paso a Come out and play, Self esteem, Gotta get Hawai, All i want, Gone Hawai y así, un desfile de éxitos. De cualquier forma, este Greatest Hits surge para celebrar dos décadas tocando juntos al servicio del punk rock, y por supuesto para el regocijo de sus abnegados fans.
