Con un aire emotivo, el compositor vuelve con una placa en la que blues y pop aparecen de la mano. Con una relativa predominancia de las guitarras, consigue un disco sobrio, que incluye versiones de temas de George Harrison y Stevie Wonder.
Ciertamente, toda una leyenda del rock, Eric Clapton es considerado como uno de los más grandes guitarristas del mundo. Con un talento natural innegable, Clapton pasó por diversas bandas (The Roosters, John Mayal & The Bluesbreakers, Yardbirds o Cream) hasta que en 1973 se lanzara como solista, iniciando así una exitosa etapa dentro de su carrera, obteniendo varios premios alrededor del mundo y ventas millonarias gracias a reconocidas y alababas producciones discográficas.
A un año desde su último disco tributo a Robert Johnson (Me and Mr. Johnson, 2004), Clapton ha decidido regresar a casa relatándonos este proceso mediante su nueva propuesta discográfica, Back Home. Un adictivo álbum de doce canciones bellas y directas en donde Revolution (single del disco) o las reversiones de temas de George Harrison y Stevie Wonder aparecen como algunas de las joyas de la placa.
Producido por el mismo Clapton y Simon Climie, Back Home se convierte en el primer álbum con temas inéditos del artista inglés en los últimos cinco años. Para la realización de esta placa, Eric Clapton contó con la participación especial de artistas de la talla de John Mayer, Stephen Marley y Robert Randolph. El resultado: un disco gratamente sencillo, sincero y emotivo.
"Una de las primeras declaraciones que hice sobre mi mismo, fue allá por los años 80, con el Journeyman. Este disco completa el ciclo en términos de hablar sobre mi viaje como músico itinerante y donde me encuentro ahora mismo, comenzando con una nueva familia. Por eso elegí este titulo. Habla de regresar al hogar y de estar en casa. Aunque volveré a la carretera el próximo año tocando estas canciones", comentó recientemente Clapton.
Sin bien, Back Home no es un trabajo intenso con punteos de guitarra incesantes (características de una etapa de su carrera), las interpretaciones y el tono intimista que logra este conjunto de doce temas (sumado a momentos geniales como la versión Love Comes to Everyone de George Harrison), hacen la nueva apuesta de Eric Clapton, un trabajo muy por sobre la media.
Es interesante analizar cómo la obra de Eric Clapton ha sobrevivido con los años mutando estilos y matices, pero sin perder ese toque "claptoniano" que su voz y guitarra han hecho trascender. En esta ocasión, el artista inglés tiñe de pop un blues sentido y sincero en donde da cuenta de su actual momento personal. Eric Clapton ha vuelto a casa.
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