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Brasil recuerda a Tom Jobim, uno de los padres de la bossa-nova

A más de una década de su muerte su música sigue siendo objeto de grabaciones y versiones en todo el mundo. El legendario músico será homenajeado con conciertos y espectáculos, donde se interpretarán sus mejoras obras musicales.


Brasil recuerda hoy a uno de los padres de la bossa-nova, Tom Jobim, que este jueves cumpliría 80 años, con conciertos, homenajes y un proyecto de ley para dedicar el día 25 de enero a este ritmo brasileño.



Antonio Carlos Brasileiro de Almeida Jobim, «Tom Jobim», quien le puso música a la letra de la famosa «Garota de Ipanema» de Vinicius de Moraes, nació en Río de Janeiro en 1927 y más de una década después de su muerte, ocurrida en Nueva York en 1994, las canciones de este compositor, cantante, guitarrista y pianista brasileño, siguen siendo objeto de grabaciones y versiones por parte de intérpretes de todo el mundo.



Los seguidores de Jobim recordarán desde hoy al genial músico en un espacio construido en homenaje al artista en el Jardín Botánico de Río de Janeiro, que mezcla sus dos pasiones: la cultura y el medio ambiente.



El primer concierto en su memoria tendrá como protagonistas a Nana y Danilo Caymmi y su hijo Paulo Jobim, e inaugurará una serie de espectáculos en su homenaje, que se desarrollarán todos los jueves en ese espacio hasta el 22 de marzo.



El aniversario de Jobim también será celebrado en otros puntos de Brasil con conciertos y espectáculos en los que se interpretarán las mejores obras del autor, y en programas de televisión, con retransmisiones de sus entrevistas y composiciones.



Además, desde el pasado viernes, el Aeropuerto Internacional de Río de Janeiro, que lleva su nombre, homenajea al maestro en la «Semana Tom Jobim», con conciertos gratuitos que reciben a los pasajeros en la principal puerta de entrada del turismo extranjero en Brasil.



Tom Jobim fue el artista que hizo popular la bossa-nova en el extranjero y con la ayuda de importantes artistas estadounidenses, como Frank Sinatra, la fusionó con el jazz para crear a fines de los años 60 un nuevo ritmo.



Jobim trabajó con grandes artistas brasileños como Chico Buarque o Newton Mendonca,, sin embargo, su principal socio musical fue Vinicius de Moraes, quien le abrió el camino a la fama cuando le pidió que le pusiera música a los versos de «Orfeo de Carnaval», la obra que juntó definitivamente a los autores de «Garota de Ipanema», una de las canciones más grabadas en la historia.



EFE

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