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Ciencia ficción: La apuesta de los sellos editoriales por la fantasía

Mundos extraños, los mismos que Tolkien y Lovecraft retrataron en el pasado, vuelven a transformarse en la delicia de los nuevos lectores, el principal punto de atracción para las editoriales y sus lanzamientos para marzo. Vampiros, hadas, historias sobre el cuerpo de Cristo, entre otras, regresan para conquistar al público adolescente y también adulto.


Hablar de vampiros a estas alturas parece casi risorio. Una historia que ha atemorizado a miles desde la primera edición de "Drácula", el original del escritor irlandés Bram Stoker y que ahora no parece asustar a nadie. Más tarde el cine se dedicó a retratar al malévolo conde, gracias a una de las figuras que mejor encarnó a Vlad Dracul "el Empalador", Bella Lugosi.



Hoy la literatura reformula al clásico vampiro y lo hace más humano, sin dejar de lado su principal atractivo como personaje, su fascinación por la sangre. Lo acerca al amor de una mujer que desea en dos formas, espiritual y lujuriosamente. Eso sí, no como cualquier hombre, sino como alguien que no puede evitar dar rienda suelta a sus instintos.



Ése es el argumento central de "Crepúsculo", una de las principales apuestas en materia de ciencia ficción de la editorial "Alfaguara" y que figura entre las novelas top 10 de los libros para jóvenes y de los textos para lectores poco habituales, según la Asociación de las Bibliotecas Americanas, una de las agrupaciones literarias y estadísticas más prestigiosas de Estados Unidos.



Este relato fantástico, afianzado en una de las leyendas más fecundas en la literatura universal, responsabilidad de la escritora Stephanie Meyer, quien con ésta, su primera novela, se trasformó en una de las autoras «más prometedoras del 2005" de Norteamérica y que, un año después de su aparición, llega al mercado local traducida al castellano.



Meyer logra articular un relato novedoso donde su protagonista, Bella, establece una tortuosa relación amorosa con un ser impensado y, al mismo tiempo, fascinante, quien a pesar del amor que siente por ella, inevitablemente se transformará en su cazador.



Bella odia Forks, el pequeño pueblo en el estado de Washington, en el que vive su padre, Charlie. Pero las cosas han cambiado para su madre, y se ve forzada a dejar la soleada Arizona para empezar una nueva vida en Forks.



Su clima lluvioso no es lo único a lo que ella cree le será difícil acostumbrarse, también lo será empezar a vivir con un padre al que apenas conoce y hacer nuevos amigos. Pero, para su sorpresa, las cosas son más fáciles: la convivencia con Charlie resulta sencilla, se convierte en una de las chicas más cortejadas del instituto y, además. conoce a Edward Cullen, un extraño compañero de biología, con quien inicia desde el principio una relación de amor-odio.



Su belleza, su constante ausencia del colegio, su capacidad para trasladarse en pocos segundos desde un lugar a otro, y su extraordinaria fuerza, son elementos que harán del joven una persona interesante para Bella.



Nada es normal en Edward. Hasta Bella que escucha las leyendas que circulan en "La Push", la reserva india, sobre los orígenes de Forks, y comprende que es uno de los "blancos", uno de los "fríos": un vampiro. El propio Edward se lo confirma, empujado por el amor que siente hacia ella. Él y su familia adoptiva llevan casi un siglo tratando de cazar sólo animales, y de llevar una vida normal. Pero a un vampiro no le resulta fácil controlar sus instintos cuando se siente atraído por alguien, y por eso Edward ha estado reprimiendo sus sentimientos.



La joven lo convence para iniciar una historia de amor. Sin embargo, su romance dura poco, ya que James, un peligroso vampiro, que no ha renunciado a la sangre humana, visita Forks y se encapricha del olor de Bella. Ésta huye a Arizona, acompañada de Cary y Alice, dos de los supuestos hermanos de Edward, pero es engañada por James, y cae en una trampa mortal. Edward logra salvarla, y juntos regresan a Forks. Allí Bella comprende que la situación es insostenible y decide entregarle su vida y convertirse en una vampiro.



Utopías futuristas



Una de las formas más fáciles de crear historias futuristas y fantásticas es indagar en el pasado de nuestras sociedades. Sin embargo, el secreto está en adaptar la realidad a una imaginaria y situarla en un espacio y tiempo que desconocemos. Las grandes historias fantásticas han emocionado a tantos desde los primeros relatos del francés Julio Verne.



Por eso, no resulta difícil comparar la temática que la novela «Enemigos del sistema», escrita en 1955 por el afamado novelista de ciencia ficción Brian Aldiss, con aquel ejercicio histórico en la literatura fantástica. Esta novela, best seller en Europa, llega por primera vez a Chile, transformándose en una de las principales apuestas del sello «Edhasa", filial de Océano editores dedicada exclusivamente a este tipo de relatos.



Aldiss fue uno de los responsables de la llamada «nueva ola» que revolucionó la ciencia ficción a mediados del siglo pasado y la convirtió en lo que se conocería como "ficción especulativa", en el sentido de prever lo que depararía el futuro.



Además, formó parte de la denominada "invasión británica de la ciencia ficción» que, además, contaba entre sus filas a Moorcock, Ballard y Brunner, tres de los exponentes más conocidos de esta corriente.



Con «Enemigos del sistema», el autor se enalteció como una de las cumbres literarias del género, gracias a su lúdico pensamiento que logró unir a la imaginación futurista con uno de los grandes paradigmas del siglo XX: el comunismo.



En el millonésimo aniversario de la fundación de la primera "Gran Utopía" completamente gobernada por la razón, un grupo de seis disidentes visita un planeta primitivo y salvaje. El sorprendente encuentro de los turistas con unas criaturas (los homosapiens), cuya mentalidad es evidentemente inferior, hace inevitable el choque cultural.



Bajo este argumento, la historia irrumpe para criticar a las dictaduras y las formas de gobiernos obreros, lo que deja de manifiesto el pensamiento ideológico del autor.



Considerada por muchos como una de las mejores novelas de Aldiss, la obra es una distopía, implacable con los totalitarismos, que por su calidad literaria es situada al mismo nivel de obras como «1984», de Georges Orwell, o «Un mundo feliz», de Aldous Huxley.



El cuerpo de Cristo



Uno de los textos más enigmáticos de la historia es "La Biblia", un libro fundamental para la mayoría las culturas occidentales, para las que es prácticamente su única conexión -al menos en el sentido espiritual- con lo que ocurrió hace más de 2000 años.



Desde el propio Dan Brown con "El Código de Da Vinci", hasta otros muchos ejemplos, han sido blanco de las críticas de la iglesia Católica por sus teorías libres sobre la existencia de Cristo.



Ahora el sello editorial norteamericano "RBA", distribuido en Chile por "Catalonia", trae otro controversial relato, escrito por Kathy Reichs. Antropóloga forense del Departamento Forense del Estado de Carolina del Norte y del Laboratoire de Sciences Judiciaires et de Médecine Légale de la provincia de Québec y miembro del "Comité Asesor de la Policía Nacional Canadiense", es una de las 56 peritos acreditados por el "American Board of Forensic Anthropology".



Con esa experiencia, Reichs, también profesora de Antropología en la Universidad de Carolina del Norte y doctora en Filosofía en Northwestern, dio vida al relato "Tras la huella de Cristo". Con este libro, la académica articula una particular visión sobre la muerte del inspirador del cristianismo.



El cadáver de un judío ortodoxo, con impactos de bala en la cabeza, aparece en Montreal. Temperance Brennan, a cargo del examen forense, recibe de pronto la visita de un desconocido que le entrega la fotografía de un esqueleto aparentemente clave. A partir de ello, la especialista se ve envuelta en una intriga que se remonta a la época de Jesucristo, descubrimientos que podrían dar un vuelco a la historia religiosa de los últimos dos milenios.



Brennan descubre que la imagen corresponde a un esqueleto desenterrado en una excavación arqueológica y que la víctima, un canadiense, dirigía un negocio de importación, posible tapadera de tráfico de antigüedades. Viaja entonces a Israel con el policía Andrew Ryan y Drum, un arqueólogo de Tierra Santa, para indagar sobre la procedencia de los restos óseos y la época exacta de la tumba donde fueron encotnrados.



Las investigaciones plantean incógnitas sobre la muerte de Cristo y los sitúa en el centro de una violenta controversia. ¿Será aquella tumba la última morada de Jesucristo? ¿Son los huesos de aquel osario los restos de Santiago, hermano de Jesús, tal como reza la inscripción? ¿O se trata de una burda falsificación? Brennan se ve implicada en el caso más controvertido de su carrera. Un auténtico desafío en el que cuantos más datos descubre, mayores son los peligros.



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