José María Memet: «Lo de Epopeya fue una exageración política»

Las divisiones que separan a Chile y Perú históricamente han estado en "boga" durante esta semana, luego de que el directorio de TVN, por petición de la Cancillería, decidiera bajar de su programación el documental "Epopeya", basado en la Guerra del Pacífico, que enfrentó a nuestro país con Perú y Bolivia en el pasado.



Algunos intelectuales nacionales piensan que dichas divisiones y acciones que impiden que una obra artística como este documental sean exhibidos, son producto de "nacionalismos estúpidos" que impiden cruzar la frontera y lograr una comunión desde el futuro y no desde una perspectiva pasada.



Esa es la opinión del poeta chileno José María Memet, que a partir del 18 y hasta el 25 de marzo, llevará a cabo una nueva versión del festival poético titulado "Chile-poesía", que en 2001 reunió a miles de personas en torno a los edificios del barrio cívico de Santiago, donde poetas de renombre internacional de habla hispana, como Ernesto Cardenal, recitaron versos al viento teniendo como único telón de fondo a la ciudad y la noche capitalina.



Hoy el motivo del encuentro poético, que se realizará en diversas ciudades del país, es otro: la unión entre los pueblos de Chile y Perú a través de la poesía, justo en un momento donde las viejas rencillas que han separado a ambas naciones durante más de 120 años, vuelven a aflorar.



Por eso y desafiando cualquier tipo de prejuicios y resquemores, Memet llevará hasta el mismísimo monitor "Huáscar", fondeado en el puerto de Talcahuano y donde Arturo Prat cayó en combate bajo la mirada de otro héroe de la Guerra del Pacífico, el capitán del navío peruano Miguel Grau, a una serie de poetas limeños, como Rodolfo Hinostroza, Rocío Silva Santiesteban y Doris Moromisato, y los chilenos Raúl Zurita, Alexis Figueroa y el propio José María Memet.



"El gran problema de las relaciones entre ambos países es que existe una óptica y una práctica del pasado llevada a cabo por las Cancillerías de ambos gobiernos", dice el poeta José María Memet en entrevista con El Mostrador.cl.



"Nosotros, culturalmente, pensamos que es necesario cruzar esa frontera desde el futuro para construir las relaciones que queremos, pero no lo vamos a conseguir desde la sangre, sino desde la amistad, desde el reencuentro, desde la paz, desde la integración", señala.



-En ese sentido, ¿qué le parece la decisión del directorio de TVN, que sacó de su programación el documental "Epopeya", por petición de la Cancillería ya que, eventualmente, podría deteriorar el buen pie en el que se encuentran las relaciones bilaterales de ambos países?
-Yo creo que eso es una exageración política que da una pésima señal, no habiendo problemas tan serios, diría yo. Los problemas históricos de la Guerra del Pacífico, obviamente, los tienen que solucionar nuestras Chancillerías, pensando en estas pésimas relaciones bilaterales durante los últimos 128 años. Pero en ningún caso es un problema cultural y que se traslade a nosotros como organizadores de "Chile-poesía". Nosotros, como organización, tenemos excelentes relaciones con los poetas peruanos. Pero, además de eso, este encuentro más allá de reunirnos y de realizar un aporte cultural al país, también está ligado a esa visión, a esa perspectiva de futuro, que tiene que existir en nuestras relaciones. No somos nosotros los equivocados, son los extremos los que están en un error.



-¿De qué manera la poesía une a ambos países separados por la historia?
-Si leemos la obra de los poetas peruano junto a la obra de los poetas chilenos, son las dos más grandes tradiciones de este continente, poéticamente hablando, donde siempre se ha producido un encuentro. Si analizamos la obra de muchos poetas peruanos nos encontraremos con un gran aprecio por Chile, su cultura y sus poetas y si analizamos la obra de los poetas chilenos, encontraremos una apreciación similar hacia ellos. Eso demuestra que durante decenios, hemos tenido extraordinarias relaciones en materia cultural. Todos los poetas tenemos lazos culturales y de amistad muy fuertes.



-El recital poético más importante de esta cuarta versión de "Chile-poesía" será en el Huascar. ¿Con este acto pretenden de alguna forma enviar un mensaje a la clase política?
-Yo creo que la señal es clara. Nosotros estamos enviando un mensaje de paz, una señal de integración, una lectura que dice que es necesario hacer esfuerzos por construir. La cultura, en ese sentido, es un aporte que sobrepasa por mucho a ciertas formas de hacer política en las cuales nosotros no creemos. La política con nuestros vecinos debe ser propositiva, abierta, franca, de transformación constante. No podemos estar en el mismo tema durante 128 años. Nosotros como intelectuales, poetas y escritores, también tenemos derecho a opinar sobre las relaciones con nuestros vecinos, nuestras relaciones internas, que son señales que implican cierto grado de generosidad. Para encontrarse hay que ser generoso.



Propicia coincidencia



Según cuentan los organizadores de Chile-poesía 2007, la coincidencia entre la polémica causada por la salida de la programación de TVN del documental "Epopeya" y la realización de este encuentro poético, es una situación coyuntural absolutamente accidental.



No obstante, la participación de poetas peruanos en eventos tan emblemáticos como éste sirven para aprovechar esa coyuntura y dar un mensaje claro. "Las situaciones coyunturales en este caso son provocadas, no son situaciones que en el tiempo se puedan pensar como situaciones inmóviles", afirma Memet.



-Desde ese punto de vista, ¿esta instancia cultural resulta más efectiva que cualquier gestión diplomática a su juicio?
-Chile-poesía no está en guerra. Nosotros, los poetas chilenos, vamos a compartir con nuestros hermanos peruanos en ese barco donde estuvieron juntos dos de nuestros héroes máximos y ahí alzaremos las voces y leeremos textos no atingentes a políticas del pasado, sino que relacionados con el presente y el futuro de nuestros pueblos y que evocan una relación de amistad y convivencia como seres humanos. Nuestro gran problema entre los ambos países debería ser solucionar la miseria en la que viven muchas personas, no otro.



-Para conseguir aquello, ¿el prestigio que Chile-poesía ha conseguido en estas 4 versiones es útil?
-Yo creo que Chile-poesía es un logro, pero más que un logro personal, es un logro para el país, para la amistad, un logro para compartir. La cultura existe como tal cuando se cultiva, eso es lo que significa cultura. Nosotros hemos cultivado aquello en los lectores del presente y los lectores del futuro. Hay otros que deberían hacer lo mismo.



-¿A qué se refiere específicamente?
-Nuestras actividades son gratuitas y el esfuerzo que se hace es muy grande, pero ese esfuerzo se valida con la acogida que tiene dentro la gente y porque a la mayoría de las personas le interesa el arte que se hace en Chile, sino no irían miles de personas a nuestras actividades.



Los nuevos detractores de Chile-poesía



A pesar del prestigio que esta instancia poética ha alcanzado a nivel nacional y también en Latinoamérica, surgen una serie de voces que critican la administración de José María Memet, uno de los impulsores de esta cruzada que se inició con el apoyo de Raúl Zurita y Mauricio Redolés.



Esas críticas apuntan principalmente al sentido de ghetto en que se ha convertido, según dicen algunos poetas jóvenes, esta instancia, donde se repiten nombres y hay poco acceso a las nuevas plumas de los versos nacionales.



Uno de ellos es Héctor Hernández, quién hace algunos días criticó públicamente a través de un medio de comunicación la gestión de Memet, calificándolo de "espectáculo poético", donde su gestor de "Don Francisco" de la poesía, quien decide cuáles son los poetas que participan y cuales no. Al respecto José María Memet fue categórico: "Él está hablando por la herido por razones muy sencillas".



-¿Cuáles son esas razones?
-Que no lo invitemos puede deberse a distintas circunstancias, entre ellas que, intelectualmente, o literariamente, no le consideremos de valor. Yo creo que él es un personajes absolutamente sobrevalorado, con una serie de acólitos a su alrededor, pero que en el fondo no tiene obra. Esa es la primera razón.



-¿Y la segunda cuál es?
-Eso habría que preguntárselo a él, porque en la primera versión de Chile-poesía él cometió un delito y eso implica que pudo haberse ido preso.



– Esa es una acusación grave. ¿A qué delito se refiere?
-Yo no soy un sapo que dirá qué fue lo que hizo. Que lo explique él. Esto es "vox pópuli", todo el mundo lo sabe, sobre todo muchos poetas jóvenes.



-¿Cómo interpreta usted a la poesía joven que se está haciendo en Chile y que se mezcla con la electrónica y con el rock, y que eso se presenta como una novedad?
-Pero se hace desde hace mucho tiempo. Se hace en Chile desde los 80, pero yo no he vivido solo en Chile, de alguna forma soy un ciudadano del mundo. Yo creo que están un poco atrasaditos, porque si recordamos a Andy Warhol y Lou Reed que a fines de los 60 ya estaban haciendo estas performance, yo creo que están un poquito atrasados.



-Entonces, a su juicio, ¿la poesía joven en Chile no es buena y carece de novedad?
-Yo creo que hay talentos, de verdad hay muchos poetas jóvenes que tienen buenas ideas, pero lamentablemente muchos de ellos se quieren ir por el atajo y aquí lo que interesa, dentro del contexto de la literatura, es construir una obra. No interesa que alguien sea más famoso o más conocido que otro, esas son construcciones mediáticas que no sirven de nada. Lo que interesa dentro de un corpus poético nacional es la obra y eso es lo que muchos, que ensalzan sus figuras mediáticas no tienen, entre ellos Héctor Hernández.



-Todo indica que ser poeta hoy en Chile, por lo menos, es sinónimo de ser cool y por eso es más importante la persona que la obra…
-Pero eso no es sinónimo de ser cool, eso es sinónimo de ser un idiota, un ignorante. Nosotros somos personas que trabajamos con el lenguaje. A mí me parece legitimo todo discurso, toda obra que proponga algo o incluso que sea la ausencia de proposición. El problema no es ése, porque lo temas siguen siendo los mismos. Si viene alguien y me nombre un tema realmente nuevo, yo me retiro de la poesía inmediatamente. Lo que sí me queda claro, es que esa intención de irse por el atajo le está haciendo un daño todos esos poetas y pagar con lectura, con silencio y con reflexión lo que implica ser poeta.



-¿Hay presencia de poesía joven en esta versión de Chile-poesía?
-Sí, por lo menos hay unos 20 poetas jóvenes participando.



-Con ese dato usted puede rebatir las críticas que se le hacen sobre la falta de espacio a poetas jóvenes…
-Por cierto. Ahora hay poetas que están como Zurita porque tiene que estar, es un fundador de esta instancia. Sin embargo si se analizan las listas de todos los festivales, hay muy poca gente que se repite.



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