»La belleza, elemento atrapado por la sensibilidad profunda de una mujer que se siente fea, es buscada con afán, rescatada y puesta en su lugar, aprisionada en su trabajo», reza el texto que su hijo menor, Ángel, calificó como lo mejor se ha escrito sobre su madre.
Después de cuatro años de permanecer agotado, el libro "La Vida Intranquila. Violeta Parra. Biografía Esencial", de Fernando Sáez, es reeditado por Ediciones Radio Universidad de Chile en coincidencia con los 40 años de su muerte.
El también es autor de "El aire visible", "La novela de Amanda Roma", "Abandonada" y "Todo debe ser demasiado" (biografía de Delia del Carril), dice que siempre se interesó en Violeta Parra. "Llegó un momento en que pensé que sería interesante tener una mirada más compleja sobre ella, más allá de sus composiciones, sino que sobre su vida", indica.
Su amplia investigación incluyó sobre todo testimonios de folcloristas. "También de sus hermanos, de Ángel (Parra) y de Marta Orrego. Entonces pude reconstruir bastante bien, sobre todo corroborar las fechas, y cómo había el sido el recorrido de la Violeta", dice Sáez.
El resultado de sus indagaciones fue la publicación del libro en 1999, gracias a la Editorial Sudamericana, la que realizó dos ediciones del texto. Esta, su tercera versión, fue publicada por Ediciones Radio Universidad de Chile.
La biografía comienza diciendo: "La belleza, elemento atrapado por la sensibilidad profunda de una mujer que se siente fea, es buscada con afán, rescatada y puesta en su lugar, aprisionada en su trabajo. La belleza es lo que conmueve de sus palabras anotadas en canciones, versos y cartas, en el colorido de los trazos de sus tapices y pinturas, en los volúmenes y líneas de los objetos fabricados en barro, alambre y papel".
Sáez sostiene la teoría de que Violeta Parra siempre intentó compensar su admitida fealdad "haciendo una vida muy estética, entonces me interesaba ir aclarando eso. Después se va esclareciendo en los distintos periodos cómo se fue metiendo en las distintas artes en que incursionó, como por circunstancias de la vida, como si hubiese sido algo no buscado, sino que fue apareciendo, algo espontáneo".
En "La Vida Intranquila. Violeta Parra. Biografía Esencial" Fernando Sáez invita a recorrer los rincones de la existencia de la artista chilena a través de las páginas del texto que el propio Ángel Parra consideró lo que mejor se ha escrito sobre su madre.
Según Sáez, "por el momento se conoce poco de ella. Hay una cierta facilidad por crear mitos en vez de conocer realmente quién fue. Entonces se habla del mito, pero en el fondo nadie se para mucho a ver el verdadero valor artístico que Violeta Parra tiene, no se valora. Es una cosa que se repite con todos los artistas en Chile".
