La crítica gastronómica del chef Gonzalo Peñafiel
Compartimos una Pichanga de conejo ($7.700), la cual estaba con demasiado sabor a vinagre, que invadía el plato en su totalidad. Pero el conejo, por su parte, estaba muy bien preparado. Pero, cuando pasamos a los fondos, la cosa cambió: platos contundentes y con muy buenos sabores. Probamos un Costillar a la chilena ($9.800), que solo le faltó un poco de crocancia al ancho cuero que traía. También pedimos una Plateada con puré picante ($10.600), donde ésta se deshacía sola y el puré picaba, tal como debe ser.
Cabildo queda al interior del Hotel Castillo Rojo. El restaurante tiene un estilo antiguo y refinado en el que se sentirá en otra época con miles de detalles que tiene en su interior. También posee una terraza cerrada y otra al aire libre; esta última muy fresca y sin ruidos molestos, un espacio acogedor y bastante cómodo.
Por su lado, el servicio es lo esperado: las personas que atienden están informadas y capacitadas sobre la carta. Buena asesoría para comer y beber.
La debilidad de Cabildo, sin embargo, fueron las entradas.
Probamos una Vianda ($9.000), pequeña ollita donde venían distintas preparaciones. Una de ellas era una empanada de pino, fría, dura e insípida y, en lo demás, la Vianda no resaltaba en ninguna de sus expresiones. Y, la porción, un tanto pequeña para su precio.
También compartimos una Pichanga de conejo ($7.700), la cual estaba con demasiado sabor a vinagre, que invadía el plato en su totalidad. Pero el conejo, por su parte, estaba muy bien preparado.
Pero, cuando pasamos a los fondos, la cosa cambió: platos contundentes y con muy buenos sabores. Probamos un Costillar a la chilena ($9.800), que solo le faltó un poco de crocancia al ancho cuero que traía. También pedimos una Plateada con puré picante ($10.600), donde ésta se deshacía sola y el puré picaba, tal como debe ser.
Hago un especial agradecimiento a Juan Manuel Pena, chef de Cabildo y gran precursor de la comida chilena siendo argentino. Pero debo decir que, aunque son propuestas bastante distintas, me quedo con Peumayén, su otro restaurante.
Constitución 195, Providencia.
Servicio: Bueno
Comida: Bueno
Ambiente: Bueno
Precio: De los $ 15.000 a $ 18.000 p/p
