Su texto fue publicado en la compilación Talentos de Chile
Tras denuncias de negligencia y de la alarmante revelación sobre la muerte de hasta 1300 niños bajo la supuesta protección del Sename, un concurso de literatura, realizado por primera vez y promovido por un programa de la Universidad Católica, reveló que lo que no puede hacer el Estado lo puede hacer la cultura. «Jamás pensé que una universidad me iba a premiar a mi», dijo Antony Moroni, de 15 años, tras ser premiado con el tercer lugar en un concurso de literatura a nivel nacional.
“Había una vez un simio que vino desde el futuro y no era un animal cualquiera. Él sabía leer, sumar, andar en auto, comía como persona, sabía hablar y lo mejor era que sabía robar bancos y blindados. Un día aproximadamente a las 12:00 pm en la calle Canadá 817 donde estaba ubicado el banco llegaron 3 sujetos y un simio con ametralladoras y le dijeron al guardia: esto es un asalto, quiero que me abran la bóveda y no le haremos nada. El guardia del banco le abrió, el simio pescó el botín de $ 3.000.000.000 y huyeron. El simio se dio cuenta que la policía los iba persiguiendo, aumentó la velocidad y pasó lo que tenía que pasar: al simio lo capturaron, quedó privado de libertad y se encuentra en el CIP San Joaquín esperando su libertad”.
Este es un cuento muy verosímil a la experiencia que pudiera haber vivido cualquiera que naciera en condiciones lejanas al ideal de vida de un entorno protector. De hecho la historia titulada El mono ladrón con mente de humano refleja en parte la realidad de su autor, Antony Moroni, un joven de 15 años que se encuentra privado de libertad en el Sename de Til Til. Antony ganó el tercer lugar en la categoría de enseñanza básica en el concurso literario de la Biblioteca Escolar Futuro (BEF), dependiente de la Universidad Católica.
Al concurso postularon 1.600 estudiantes de todo el país en las categorías de Cuento, Poesía e ilustración, llegando finalmente más de 2.000 trabajos. Los estudiantes provienen de establecimientos vulnerables donde la Biblioteca Escolar Futuro tiene una sede, incluidos centros del sename y el liceo municipal que se ubica al interior de la cárcel de mujeres de San Joaquín. De todos los relatos, 54 fueron premiados y elegidos para componer un libro con el compilado de las creaciones artísticas de los participantes, titulado Talentos de Chile.
En muchos de los relatos publicados en el libro, la ficción se mezcla con la realidad. Se puede notar en los cuentos, la dura realidad de quién hizo las decisiones equivocadas también por falta de oportunidades. Sin embargo, la falta de un incentivo mayor en su talento no fue una razón para que los postulantes del concurso desistieran de poner en papel lo que sentían e imaginaban.
Jóvenes premiados en el concurso de Literatura organizado por la Biblioteca Escolar Futuro
Mientras las condiciones de vida no son las mejores, iniciativas como de la BEF busca encontrar los talentos escondidos en esos lugares. Francisca Vergara, directora ejecutiva de la Biblioteca y una de las organizadoras del Concurso Literario 2016, señala que el éxito fue tan grande que los buenos resultados indican que en el futuro el proyecto debiera continuar para inspirar y cambiar la vida de cada vez más jóvenes.
“Las obras que hay son muy buenas, y en general son de niños que nunca a ellos alguien ha tomado la iniciativa de potencializar sus talentos, de todas maneras será la primera de muchas más”, revela. Lo que sostiene la directora se nota también en la actitud de Antony tras saber que fue reconocido por su texto. Una de las frases que el joven dijo después de quedarse impresionado con la noticia fue: “Nunca pensé que una universidad me iba a premiar. Jamás en la vida había pasado eso por mi cabeza”.
Actualmente existen 11 sedes asociadas de la Biblioteca desde Alto Hospicio hasta Villa Rica. En el comienzo de este año fueron enviadas las convocatorias a todos los colegios donde la Biblioteca está presente y se hicieron distintos talleres en el área de la literatura y artes a fines de fomentar la creatividad de los jóvenes durante todo el primer semestre.
“Los talleres de poesía, ilustraciones y cuentos eran las distintas líneas del concurso, y se hacieron de manera preparatoria para despertar el interés acerca de la literatura. Hubo una pre selección que estuvo a cargo del equipo de la Biblioteca Escolar con algunos ayudantes, profesores de Letras y después pasaron a jurados, que estuvieran compuestos por académicos de la universidad, gente del Consejo de la Cultura y escritores”, explica Vergara.
La mayoría de los postulantes fueron niños y jóvenes de los colegios, aunque el concurso está enfocado en todos estudiantes en situación de vulnerabilidad y por eso engloba también las mujeres de la cárcel de San Joaquín, donde hay un Liceo Municipal. Se postularon textos e ilustraciones en las categorías de enseñanza básica con estudiantes del 5º a 8º y la de los que están en el 1º al 4º medio.
Además de Antony, tres mujeres de la cárcel ganaron mención honrosa, una por ilustración y las otras dos por poesía. En los cuentos, unos de los destacados fue el de Cristóbal Fuentes del 6º básico del colegio de Las Cruces que ganó el primer lugar con Pedro y su poder.
Casos así demuestran que si estos jóvenes tuvieran el aporte apropiado, podrían (y aún pueden) tornarse grandes escritores, como de hecho ha pasado muchas veces en la historia. Uno de los casos más emblemáticos fue el del Premio Nacional de Literatura de Francia, Jean Genet, quien tras ser abandonado al nacer vivió casi toda su vida en horfanatos y posteriormente en la cárcel.
Claudia Romo terapeuta del Sename de San Joaquín ha tenido mucho contacto con Antony y reitera la fuerza del cambio que el premio genera en la vida no solo en él sino en todos los estudiantes que participan.
“Hay mucho talento no solamente dentro de Antony pero dentro de muchos chicos. Yo creo que eso tiene que ver con una visión no sólo de Sename sino que también una visión social de sacarle partido a la gente que tenemos mucha gente con talento y habilidades en este país, e yo creo que eso está se desperdiciando en todo el tipo de sentido. Los chiquillos son muy hábiles e inteligentes, lo que les falta es refuerzo y un trabajo y alguien para guiarlos en ese trabajo, no solamente en los aspectos de la tarea misma sino que también todo que tiene que ver con competencia, para poder desarrollarlas como las habilidades sociales, el comportamiento, el trabajo en equipo, la tolerancia de trabajar con otros. Son cosas que uno va formando para largo plazo, no solamente en una actividad u otra. Entonces mientras no se haga todo ese trabajo conjunto, completo a nivel social, los talentos se van a ir tirando de poquIto a la basura”, sostiene Romo.
En la época que participó, Antony estaba en el Sename de San Joaquín pero después fue transferido a Til Til para cumplir su pena. Por razones de seguridad resultaba muy complejo Antony podiera asistir a la premiación así que se preparó una ceremonia especial en la que miembros del jurado fueron hasta el centro de internación para realizar la premiación, todo con una semana de antelación a la ceremonia oficial . Ya en el lugar surgió la idea realizar una excepción con medidas especiales como estar acompañado por personal de Gendarmería de Civil para llevarlo a la ceremonia oficial con los otros participantes de los colegios de todo el país en la Universidad Católica en Santiago.
“Nos decían en el Sename que era la primera vez que se hacía algo así, que creían que hacer ese esfuerzo valía la pena para estimularlos. La experiencia fue muy buena pues de verdad había el interés de él con el tema e ir a la premiación que le potencializaría más ese estímulo, es algo que generalmente no se ve”, destacó Romo.
La terapeuta sigue reiterando que la cuestión es más profunda que la crisis alarmante que vive el Sename. “Debería ser la misión principal dentro de toda la medida, que tu puedes encontrar alguna actividad social que sea satisfactoria para la persona y se pueda desarrollar en cuanto a eso es uno de los caminos más importante para una reinserción. Porque encuentras con sentido a tu vida pero de una manera distinta que es aceptada y premiada por el resto”, concluye.
