Seminario Internacional de Educación Socio-Emocional y Convivencia Escolar
La violencia escolar afecta los resultados académicos. Así lo evidencian diversas encuestas nacionales de convivencia escolar y lo ratifica la Cepal y Unicef con el informe Las violencias en el espacio escolar, que presentaron este año. En él, Chile es identificado como el país latinoamericano más afectado en su rendimiento académico por la violencia escolar: las calificaciones en lectura y matemática se ven reducidas hasta por 20 puntos cuando se percibe violencia en las aulas y hasta en 33 puntos en ciencias.
En 2014, el Mineduc y la Agencia de Calidad de la Educación incorporaron los Indicadores Personales y Sociales (IDPS) a la prueba SIMCE para evaluar aspectos como la convivencia escolar, autoestima académica, participación y formación ciudadana, hábitos de vida saludable y equidad de género, entre otros.
También la OCDE impulsará a partir del año que viene la evaluación del bienestar en las pruebas PISA 2018 para todos los países miembros.
Estas medidas responden a diversos estudios que han demostrado que mejorar la convivencia escolar, y la experiencia que viven los estudiantes en el aula, es fundamental para evitar la proliferación de la violencia y el bullying, el fracaso y abandono escolar y la depresión infanto-juvenil.
¿Y cómo se puede mejorar la convivencia en las escuelas? Con herramientas de la educación emocional. “Los niños deben aprender desde la primea infancia a regular sus emociones para relacionarse adecuadamente con el otro. Para eso deben comprenden sus propias emociones y sentimientos y la de los otros”, explica Xavier Oriol, académico UNAB.
Para eso, agrega, los profesores también requieren un buen manejo de sus emociones para gestionar los grupos de alumnos y ayudarles a desarrollar estas habilidades.
Rafael Bisquerra, académico de la Universidad de Barcelona, es uno de los impulsores de la educación socio-emocional en Europa. Los estudios de su grupo de investigación han demostrado que trabajar desde las primeras edades el desarrollo de las habilidades socioemocionales es fundamental para mejorar el bienestar subjetivo del niño, la convivencia escolar y el rendimiento académico. “En este sentido, la mejor forma de poder prevenir el bullying, que se inicia a partir de los 8 años, es poder desarrollar estas habilidades”, dice Oriol.
Bisquerra y Oriol expondrán sus trabajos sobre el tema en el Seminario Internacional de Educación Socio-Emocional y Convivencia Escolar, que organiza la Facultad de Educación de la UNAB y que se realizará el próximo martes 20 de junio, a las 9.15 horas, en el auditorio Andrés Bello (edificio R3), en Campus República, Santiago.
Rafael Bisquerra Alzina es académico de la Universidad de Barcelona (UB) y director del Postgrado en Educación Emocional y Bienestar (PEEB) y del Postgrado en Inteligencia Emocional en las Organizaciones (PIE) de esa universidad.
Durante los últimos años ha liderado la evaluación de programas e intervenciones de educación socio-emocional en escuelas e institutos.
Es autor de varios libros y artículos. Parte de su trabajo está en su sitio web www.rafaelbisquerra.com/es/
Xavier Oriol, doctor en Psicología, profesor asociado y miembro del Núcleo de investigación de la Facultad de Educación de la Universidad Andrés Bello, es el segundo expositor del encuentro. Es miembro del Grupo de Investigación en Orientación Psicopedagógica (GROP) y del Grupo de Investigación en Infancia en Riesgo Social de la Universidad Autónoma de Barcelona.
Su tema será “Escuelas que promueven el bienestar en la infancia y adolescencia”, en el cual abordará los principales retos que afrontará el sistema educativo en los próximos años, ante el aumento de la depresión, el suicidio adolescente y los trastornos mentales en general.
