Brasil se encontró con el campeón

El esperado duelo del campeón de América contra el pentacampeón mundial se definió en los 20 minutos finales de un partido áspero y parejo en el que ambos equipos tuvieron momentos de lucidez y otros tantos de angustia. La efectividad de los dos atacantes del conjunto chileno, Eduardo Vargas y Alexis Sánchez, desequilibró el encuentro y premió, fundamentalmente, el único aspecto en el que un cuadro fue superior al otro: el táctico.

Este elemento, que proviene de la visión los directores técnicos, ha sido clave en todas las victorias conseguidas por Chile en sus encuentros oficiales ante Brasil y le ha permitió victorias contundentes: 4-1 en el Sudamericano de Montevideo, en 1956; 4-0 en la Copa América de Argentina, en Córdoba, en 1987; 3-0 en las Clasificatorias para Corea-Japón, en Santiago, en el 2000.

Esta vez el marcador no fue tan categórico, pero tuvo la holgura suficiente como para ponerlo en el marco de las hazañas anteriores.

Cuando el juego de Brasil prevalecía y el equipo verde-amarillo imponía un juego más armonioso y contundente, una movida táctica no sólo equilibró las acciones sino que le permitió a la Roja plantarse de igual a igual. El ingreso de Mark González en reemplazo de Francisco Silva hizo que la defensa chilena se reagrupara con cuatro en el fondo (Mauricio Isla, Gary Medel, Gonzalo Jara y Jean Beausejour), mientras el jugador cruzado se instalaba como puntero izquierdo. Aparte de propiciar de inmediato una jugada de gol (remate de Alexis Sánchez que dio en el vertical derecho del arco de Jefferson), González le puso freno a la subida de Dani Alves, el lateral brasileño que más desajustes causaba con sus avances.

Desde ese momento, el encuentro tuvo un equilibrio que sólo se rompió a los 72 minutos de juego con el gol de Vargas y que se definió a los 89’ con la anotación de Sánchez.

Otro cambio acertado causó el desequilibrio final: Jorge Valdivia no repetía actuaciones deslumbrantes y ni siquiera causaba desajustes mayores en la defensa visitante. El ingreso de Matías Fernández, a los 63, revirtió ese déficit y lo transformó en ganancia. Tres veces lo habían derribado cuando se encaminaba con decisión hacia el área brasileña. En la tercera infracción, él mismo se encargó de servir el tiro libre y su centro fue conectado de volea por la infalible “Edu” Vargas, que en sus clubes juega mediocremente y en la selección se transforma en un crack de categoría mundial.

Había que aguantar la previsible reacción de los pentacampeones, y otra movida táctica le cortó las alas: previendo que Brasil recurriría al juego aéreo, Jorge Sampaoli dispuso el ingreso de Cristián Vilches, el único que podía agregar estatura al bloque defensivo. De este modo, Chile soportó bien el aluvión y tuvo capacidad para aprovechar el adelantamiento del adversario. Un fulminante contraataque encabezado por Alexis Sánchez culminó con un pase perfecto de Arturo Vidal para que el mismo “Niño Maravilla” sentenciara el cotejo.

Ausente Neymar, por suspensión, las posibilidades del cuadro visitante se redujeron a las acciones de Ricardo Oliveira, goleador en el campeonato brasileño, que ingresó muy tarde, pero que encontró un par de pelotas bien entregadas para angustiar a Claudio Bravo con remates que se perdieron por muy poco.

Ausente Charles Aránguiz, por lesión, el equipo chileno tuvo buenas armas para reemplazarlo. La más efectiva fue la actuación de Arturo Vidal, cuya presencia estuvo en duda hasta el último momento, y que nuevamente respondió pese a los dolores.

Destacadísimos fueron también los trabajos de Claudio Bravo y Gonzalo Jara.

Pero la actuación más sobresaliente la protagonizó Gary Medel, al que el estadio entero hizo coro para cantarle loas.

Queda aún toda la etapa clasificatoria. Faltan nada menos que 17 partidos. Pero este comienzo, ante uno de los rivales más difíciles, abre ilusiones bien fundamentadas: hay individualidades, hay buena dirección y hay un gran equipo.

Perú, el próximo martes en Lima, servirá para confirmarlo o desmentirlo.

PORMENORES
Cancha: Estadio Nacional.
Público: 42.000 espectadores, aproximadamente.
Árbitro: Roddi Zambrano, de Ecuador.

CHILE (2). C. Bravo; F. Silva (40’, M González), G. Medel, G. Jara; M. Isla, M. Díaz (81’, C. Vilches), A. Vidal, J. Valdivia (63’, M. Fernández), J. Beausejour; A. Sánchez y E. Vargas, DT: Jorge Sampaoli.

BRASIL (0); Jefferson; Dani Alves, Miranda, David Luiz (36’, Marquinho), Marcelo; Willian, Luiz Gustavo (81’, Lucas Lima), Elías, Oscar, Douglas Costa; y Hulk (76′, R. Oliveira).

Goles: 72’, Vargas; 89’, Sánchez.
Tarjetas amarillas: M. Díaz (CH); Luiz Gustavo (B).