«No tenemos un rendimiento regular. Hacemos un partido aceptable y luego uno malo y no tenemos la contundencia ofensiva para traducir en goles. Quedan siete fechas, a ver si sumamos para meternos en la liguilla», sostuvo el DT de Colo Colo.
El técnico de Colo Colo, Gustavo Benítez, lamentó la eliminación de Copa Chile a manos de San Luis de Quillota y reconoció que «nosotros tenemos que salvar esta situación y no le podemos echar la culpa a nadie».
Benítez volvió a salir al paso de las críticas, pero aseguró que sólo les queda trabajar, que a estas alturas no puede prometer nada.
«No soy un vendedor de humo para decirle a la gente que el próximo domingo (ante Cobreloa) mejoraremos. Nosotros tenemos que salvar esta situación, no le podemos echar la culpa a nadie», sostuvo.
El estratego guaraní, al analizar el partido, comentó que «tuvimos contundencia en las líneas que no pudimos traducir en goles a favor (…) debimos llegar con una ventaja desde Quillota. Hicimos allá un buen partido y generamos oportunidades, pero por momentos nos desesperamos un poco».
Según Benítez, el principal problema es que «no tenemos un rendimiento regular. Hacemos un partido aceptable y luego uno malo y no tenemos la contundencia ofensiva para traducir en goles. Quedan siete fechas, a ver si sumamos para meternos en la liguilla».
Finalmente, enfatizó que no ha pensado en presentar la renuncia: «Uno siempre mantiene la ilusión de mejorar en el partido siguiente. Si yo me entregara no sería un buen conductor. No me quiero ir así, perdiendo, quiero levantar cabeza, pero no depende de mí», sentenció.
