PAÍS
Tras una velatón realizada en el lugar de los hechos, Claudio Morales de la Conataxi, indicó que la situación «se está escapando de las manos».
Tras el baleo a un grupo de taxistas por parte de un chofer de Uber, como detalló Carabineros, y que terminó con uno de ellos muertos, la Conataxi se movilizó para despedir a su colega fallecido, partiendo en la Posta Central y finalizando en el lugar donde ocurrió el hecho, en Agustinas con Almirante Barroso, donde homenajearon al conductor con una velatón.
En dicha instancia, uno de los dirigentes de la Conataxi, Claudio Morales, se refirió al hecho, indicando que ahora se viene será «una guerra sin cuartel», entre taxistas y choferes de Uber.
«Se está escapando de las manos», añadió, explicando que, «para nosotros, como dirigentes, es difícil mantener a las bases en calma», además de mandarle «un mensaje» a los administradores de las plataformas. «Así como les sacan el jugo con el 28%, que ahora se preocupen de sus socios conductores», declaró.
Sus dichos fueron condenados por la intendenta de Santiago, Karla Rubilar, quien señaló que «esa amenaza que él realiza no es tolerable ni aceptable», agregando que «me parece extremadamente grave que un dirigente amenace la seguridad y la tranquilidad en la cual se desplazan las personas en la región Metropolitana».
El presunto responsable de los hechos fue detenido por Carabineros, quien confirmó que sí era chofer de Uber pero que al momento de ocurrir los hechos, no estaba conectado a la aplicación. En su posesión se encontraron dos pistolas y una escopeta, quedando detenido por presunto homicidio y lesiones de carácter grave.
