El vicepresidente senior de funciones corporativas de Latam, Roberto Alvo, indicó que el acuerdo con American Airlines, Iberia y British Airways abarcará al 30% de los ingresos de la compañía.
En el peor momento de la aerolínea Latam, ligada a la familia Cueto, ayer se conoció por fin una buena noticia para la compañía que, desde la fusión con la brasileña TAM, solo ha sabido de dolores de cabeza. Junto con ello, la crisis económica en el gigante sudamericano ha impactado duramente su negocio y las perspectivas aún no son auspiciosas.
En medio de eso, ayer la empresa informó que firmó un Joint Business Agreement (JBA) con American Airlines y en paralelo con IAG (que incluye a British Airways e Iberia). En el primer caso, para conectar las redes de vuelos de AA en Estados Unidos y Canadá con los de Latam a Norteamerica y con IAG para vincular vuelos con Europa y en forma inversa con vuelos con Sudamerica.
Según la empresa, estos acuerdos darán acceso a una red de 420 destinos, mejores precios a clientes en destinos hoy no abordados, junto con un potencial de abrir nuevas rutas. El acuerdo –que profundiza la alianza Oneworld– no incluye cambios en propiedad de ninguna de las aerolíneas.
La firma indicó que más de 200 destinos de American Airlines conectarán con sobre 90 vuelos diarios entre Sudamérica y Estados Unidos operados por American Airlines y Latam, al tiempo que el acuerdo con IAG permitirá abordar 87 destinos que conectarán con 45 vuelos diarios entre Sudamérica y Europa operados por IAG y Latam.
También dijeron que existirá un alto potencial para desarrollar nuevas rutas y vuelos directos a destinos nuevos o ya operados por la firma. Estos acuerdos incluirán a clientes frecuentes Lanpass y Tam Fidelidade.
De acuerdo a las estimaciones de la empresa, la aprobación de las autoridades competentes debiera durar entre 12 y 18 meses para concretarse. Para la implementación, se estima que se requerirá entre uno y dos años. Con ello, el acuerdo se haría efectivo parcialmente en 2017 y definitivamente en 2018.
El vicepresidente senior de funciones corporativas de Latam, Roberto Alvo, explicó que la suma de los vuelos con Estados Unidos y Europa representa casi el 30% de los ingresos actuales de la compañía, esto es, alrededor de US$ 3.000 millones.
Cuánto crecerán los ingresos de la firma con estos acuerdos es una incertidumbre para el mercado y en parte también para la empresa, pues mientras no obtengan las aprobaciones, no pueden acceder a información de las condiciones en que hoy se realizan los vuelos de las aerolíneas con las que firmaron el acuerdo. En todo caso, Alvo señala que hay algunos acuerdos relativos a la forma en que se repartirán los ingresos con los integrantes del referido pacto, pero que no pueden revelarlos.
Por ello, el ejecutivo dice que estarán respondiendo desde el investor relation a analistas en estos días. El anunció ocurrió al cierre de la jornada bursátil de ayer, por lo que solo hoy se verá la recepción del mercado a la noticia.
Alvo asegura que, después de la fusión con Tam, este es uno de los mayores acuerdos firmados por la compañía y parte importante de la apuesta de crecimiento en el futuro pasará por el éxito de este acuerdo.
El anuncio llega en momentos en que la empresa enfrenta severos problemas financieros derivados del impacto en sus ingresos y ganancias, de la situación en la región y en particular de Brasil. De hecho ha debido hacer fuertes ajustes en sus rutas en dicho país y los resultados siguen siendo malos.
Por ello, Alvo reconoce que, si bien la coyuntura no “forzó” la firma de estos acuerdos, sí concede que “llega en un buen momento para la situación actual“ y que “es una buena noticia para la compañía, dada la situación en que está”.
