Informe de percepción de negocios del Banco Central
Según la encuesta del instituto emisor, las empresas en el país no ven mayores cambios para este año respecto al 2015. La mayoría de los consultados vuelven a indicar que la debilidad de la demanda sigue limitando aumentos de precios. Frente al mercado laboral, ven más personas buscando trabajo y una baja en las pretensiones salariales.
Las empresas siguen preocupadas en medio del escenario de desaceleración económica.
De acuerdo al Informe de Percepeción de Negocios que publicó esta mañana el Banco Central, se desprende que la gran mayoría que no ve de mayores cambios en este año respecto a 2015.
La consulta, que cuenta con la participación de la administración de alrededor de 190 empresas a lo largo del país, fue realizada entre el 30 de marzo y el 25 de abril de 2016.
Dentro de lo positivo que destaca el informe, resaltan los buenos resultados de los sectores ligados al turismo y al comercio gracias a la temporada de verano y, en particular, de turistas argentinos.
Por otro lado, en el rubro de la construcción e inmobiliario se destaca la baja en la velocidad de ventas y las mayores dificultades que se observan para la venta de propiedades dada la reticencia de las personas a endeudarse y las exigencias más altas para el otorgamiento de créditos hipotecarios, en particular por el mayor porcentaje de pie que exigen los bancos.
En ese sentido, los entrevistados esperan que este fenómeno se acentúe en el futuro. Un aspecto que los entrevistados destacan es la preocupación por una caída en promesas de compra en los próximos meses.
En el mercado laboral, el informe destaca la percepción de mayores holguras que se deriva de más personas buscando trabajo y de una baja en las pretensiones salariales.
El estudio señala que a diferencia de trimestres previos, salvo algunas industrias específicas, «la mayoría de los consultados no indican que ellos u otras empresas hayan concretado un número importante de despidos. Sigue habiendo una preocupación relevante por los efectos de la reforma laboral«.
En cuanto a los costos, a diferencia de informes previos donde la preocupación por su alza era generalizada, ahora
los entrevistados perciben más bien una estabilidad de los mismos. La mayoría de los consultados vuelven a indicar que la debilidad de la demanda sigue limitando aumentos de precios.
Destacan además que, tal como ha sido la tónica de los últimos trimestres, el foco sigue en el control y reducción de los costos, pero ya hay varios entrevistados que señalan que han llegado a un punto donde las ganancias de eficiencia se han agotado.
Gran parte de las empresas y bancos da cuenta nuevamente de mayores restricciones en las condiciones financieras.
Varios bancos señalan la dificultad de colocar nuevos créditos, ya sea por una demanda débil de empresas y personas, o por políticas de riesgo más estrictas. Se destaca la generalización del alargue de los plazos de pago a los proveedores y en algunos casos se indican las dificultades de caja que han surgido por este factor.
