Macri ha recortado los subsidios, devaluó el peso y despidió empleados estatales para reducir el déficit fiscal, mientras viaja por el mundo para atraer inversiones y evitar una caída en el nivel de vida del país. Los números dados a conocer ayer indican que quizá no tenga tanto tiempo como esperaba, porque los sindicatos están intensificando las protestas contra los despidos. El presidente, que originariamente pronosticó que la economía volvería a la senda del crecimiento en el segundo semestre, ahora dice que eso podría no ocurrir hasta el primer trimestre de 2017.
La desregulación de la economía argentina llevada a cabo por el Presidente Mauricio Macri ha costado más empleos de los que los economistas esperaban, de acuerdo con el primer informe del mercado laboral publicado desde que el nuevo gobierno llegó al poder en diciembre.
La tasa de desempleo es del 9,3 por ciento, dijo el Instituto Nacional de Estadística y Censos en un comunicado entregado a la prensa en Buenos Aires el martes, en comparación con la mediana de las estimaciones de cinco economistas encuestados por Bloomberg que arroja un 8,3 por ciento. El gobierno ha descalificado por poco fiables los informes sobre el mercado laboral del gobierno previo, de Cristina Fernández de Kirchner.
«Es evidente que estamos ante una situación grave en el mercado laboral», dijo Jorge Todesca, director del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Macri ha recortado los subsidios, devaluó el peso y despidió empleados estatales para reducir el déficit fiscal, mientras viaja por el mundo para atraer inversiones y evitar una caída en el nivel de vida del país. Los números dados a conocer ayer indican que quizá no tenga tanto tiempo como esperaba, porque los sindicatos están intensificando las protestas contra los despidos. El presidente, que originariamente pronosticó que la economía volvería a la senda del crecimiento en el segundo semestre, ahora dice que eso podría no ocurrir hasta el primer trimestre de 2017.
Las últimas cifras sobre desempleo también ponen de relieve el intento de Macri por recuperar la confianza de los inversores en los datos económicos de Argentina. Macri contrató a Todesca para encabezar el INDEC y le encomendó la tarea de revisar y crear nuevos índices para medir el producto interno bruto, la inflación y el desempleo luego de que el Fondo Monetario Internacional sancionó a Argentina por manipular las estadísticas entre 2008 y 2013.
Hasta el momento, Todesca ha producido nuevas cifras del PIB que mostraron una profundización de la recesión este año y una inflación del 4,2 por ciento en mayo.
