Desde que se implementaron las tasas negativas el año pasado, los costos de las hipotecas han aumentado en suiza, ya que los bancos buscan compensar los gastos derivados de los depósitos, y algunas entidades financieras han traspasado las tasas negativas a los clientes institucionales.
El caso de Suiza muestra que las tasas negativas pueden tener éxito en los países pequeños, dijo Tidjane Thiam, máximo responsable de Credit Suisse Group AG.
Haciéndose eco de los comentarios que hizo el mes pasado Mark Carney, el Gobernador del Banco de Inglaterra, el director del segundo mayor banco de Suiza dijo que tampoco era un “gran admirador” de la herramienta política, a la que han recurrido las autoridades de la eurozona, Dinamarca y Suecia en un intento por avivar la inflación y fortalecer sus respectivas monedas.
“Creo que este tipo de tasas puede funcionar en una economía pequeña”, dijo Thiam, el martes en un discurso en una conferencia bancaria en Londres. “Esa es la declaración que estoy dispuesto a defender con fuerza”.
El Banco Nacional Suizo (SNB, por sus siglas en inglés) fijó su tasa de depósito en menos 0,75 por ciento en enero del año pasado para reducir el atractivo del franco entre los inversores y, así obstaculizar la apreciación de la moneda frente al euro.
El SNB permite que una cierta cantidad de dinero en efectivo esté exenta de este cargo, y su umbral está fijado actualmente en 20 veces más que las reservas mínimas de una entidad. Bajo el umbral actual, el 73 por ciento de los depósitos locales a la vista estuvieron exentos de la tasa de depósito a partir de marzo, según la investigación de Credit Suisse.
Desde que se implementaron las tasas negativas el año pasado, los costos de las hipotecas han aumentado en suiza, ya que los bancos buscan compensar los gastos derivados de los depósitos, y algunas entidades financieras han traspasado las tasas negativas a los clientes institucionales. Hasta ahora, los clientes minoristas no se han visto afectados mayormente.
A diferencia del Banco Central Europeo, que ha estado buscando aumentar la presión sobre los precios, el Banco de Inglaterra ha optado por no recortar las tasas por debajo de cero, ya que Carney ha dicho que estas tienen consecuencias negativas para el sistema financiero y los ahorradores. Por otra parte, en Dinamarca, el líder de la asociación bancaria dijo que puede que la política no sea tan perjudicial para las entidades de préstamos como se pensó alguna vez.
“En el contexto de la economía suiza, uno puede ver a través de las cifras del Banco Suizo que la política ha sido bien administrada, y que ha sido manejable”, dijo Thiam. Sin embargo, también recalcó que para los fondos de pensiones y otros gestores de activos los bajos rendimientos son un problema.
