Si bien la economía on-demand ha sido un fenómeno en Estados Unidos hace una década, recién ahora está creciendo en Latinoamérica. Pero en los países donde existe, está prosperando. Como resultado, hay grandes oportunidades para emprendedores en la región interesados en lanzarse a este mercado.
Desde una perspectiva cultural, el momento es el adecuado por una serie de razones. Primero, hemos visto más familias jóvenes en las cuales ambos padres trabajan a tiempo completo. Con menos tiempo y más ingresos disponibles, la economía on-demand es bastante útil.
La segunda razón es el rápido crecimiento del comercio electrónico. Todavía no es tan alto como en EE.UU., pero ahora hay muchos consumidores dispuestos a comprar online.
Tercero, la prevalencia de los smartphones y proveedores de servicios móviles. Ahora hay 155,9 millones de usuarios de teléfonos inteligentes en la región. Cuando se mezclan estos factores, la región está lista para un crecimiento de la economía on-demand.
Hasta ahora, el modelo económico está creciendo más rápido en ciertos países, como Brasil, uno de los países tecnológicamente más avanzados en la región. Pero también está creciendo en Chile y México a tasas similares. Por industrias, la principal en el mercado on-demand es el transporte (con Uber y Cabify), pero también está ganando fuerza en otros espacios como la compra de abarrotes (Cornershop), reparaciones en el hogar y servicio de belleza.
Un ejemplo es la compañía de servicios para el hogar, Tuten, que recientemente fundé como estudiante del MBA del MIT. Con el apoyo de Corfo, lo lanzamos en Chile en octubre de 2015. En un mes, estábamos ofreciendo servicios de gasfitería, eléctricos, de limpieza y hemos agregado más servicios cada mes.
Desde su lanzamiento, Tuten ha visto un crecimiento de 30% mensual y hoy nos estamos expandiendo con un modelo B2B hacia retailers de mejoramiento del hogar, donde entregamos servicios de instalaciones para sus clientes. También planeamos expandirnos a otros países, como México y Colombia.
El crecimiento de la economía on-demand es saludable para Latinoamérica, e incluso podría llevar a grandes mejoras económicas, como un mayor salario por hora. Dado que los clientes están dispuestos a pagar un mayor precio por calidad, los trabajadores, a cambio, reciben mejores tarifas por hora.
Todavía estamos en los primeros años de esta nueva economía en Latinoamérica, pero claramente está aquí para quedarse. El modelo on-demand puede funcionar en cualquier país y mercado. Es solo cosa de tiempo antes de que se creen plataformas en nuevos mercados.
Roi Amszynowski
2016 graduate of the MIT Sloan School of Management’s MBA Program
Fundador de Tuten
