Dimon, de 61 años, que se ha descrito a sí mismo como “apenas demócrata”, lanzó varias críticas a Trump durante una charla de una hora que abarcó desde la actual reforma fiscal hasta las lecciones de la crisis financiera.
Jamie Dimon, máximo responsable de JPMorgan Chase & Co., dijo que si tuviera que apostar al resultado de las elecciones de 2020, lo haría por un demócrata en la Casa Blanca.
“Mi hipótesis es tan buena como la suya, pero si tuviera que hacer una apuesta”, sería a que Donald Trump será un presidente de un solo mandato, dijo Dimon este miércoles en un evento en el Economic Club of Chicago. “Los demócratas tienen que encontrar un candidato razonable. Si tienen uno totalmente izquierdista, Trump volverá a ganar”.
Dimon, de 61 años, que se ha descrito a sí mismo como “apenas demócrata”, lanzó varias críticas a Trump durante una charla de una hora que abarcó desde la actual reforma fiscal hasta las lecciones de la crisis financiera.
Respecto del país que se encuentra al sur, Dimon dijo que “nunca deberíamos ser groseros con un vecino como México”. Dimon admitió que a veces el presidente “tiene razón en parte”, como en su posición con China, que tiene ventajas injustas en términos de intercambio comercial. Y el máximo responsable opinó que el alcalde de Detroit, Mike Duggan, debería ser presidente, en base a lo que hizo con esa ciudad.
Dimon, que es presidente de la Business Roundtable además de dirigir el banco estadounidense más grande, también propuso lo que le gustaría ver en la reforma fiscal que Trump apunta a convertir en el logro distintivo de su primer año en la presidencia. Estados Unidos necesita bajar las tasas corporativas para que las empresas dejen de irse al exterior, aunque eso signifique elevarlas para los individuos ricos y eliminar la exención fiscal sobre la participación en beneficios para los gerentes de inversión, dijo Dimon.
Dimon también dijo que quiere ver tasas fiscales negativas para los individuos de menores ingresos y está a favor de limitar la deducción tributaria local y estatal porque favorece principalmente a los ricos en estados con gasto elevado como Nueva York, donde JPMorgan tiene su sede.
“No creo que los tipos de capital riesgo deban discutir por la participación en beneficios, no creo que los tipos de fondos de cobertura deban discutir por los diferimientos, no creo que yo deba discutir por rebajar mi tasa”, dijo. “Si quieren subirme la tasa, adelante”.
Dimon también planteó varias quejas que ya había expresado. Dijo que lamenta haber comprado Bear Stearns Cos. porque su firma fue posteriormente multada por las acciones de ese banco. Dijo que escribirá un libro sobre las lecciones que dejó la crisis financiera, y nombrará a las personas que trataron injustamente al banco con respecto a la compra solicitada por el gobierno.
“No volveré a estrecharle la mano al gobierno”, dijo Dimon. “No confío en ninguno de ellos, nunca”.
Otros temas que abordó:
* JPMorgan, que anunció inversiones en Detroit y Chicago, analiza Nueva Orleans y Washington como próximos objetivos para su iniciativa de crecimiento.* Dimon dijo que los bancos chinos tienen una ventaja injusta porque pueden adquirir más fácilmente empresas estadounidenses que a la inversa.* Los reguladores europeos deben permitir la formación de un banco paneuropeo para ser competitivos con otras entidades crediticias globales.
