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Multicaja logra acuerdo con Visa pero espera señal del Gobierno para terminar monopolio del pago con tarjetas MERCADOS

Multicaja logra acuerdo con Visa pero espera señal del Gobierno para terminar monopolio del pago con tarjetas

Natalia Saavedra Morales
Por : Natalia Saavedra Morales Editora periodística El Mostrador Mercados
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La propuesta de Multicaja es que el Gobierno tome la posta y le insista al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia que termine de explicitar cómo romper con las condiciones diferentes para un mismo negocio. «No todo tiene que ser mediante ley», plantea el socio de la señalada compañía, Javier Etcheverry, quien ya inició una serie de acercamientos con las autoridades para hacerles llegar minutas y datos del asunto.


Unos US$ 30 millones ha invertido Multicaja, ligada a Javier Etcheverry, en la puesta en marcha de la compañía que ha buscado romper con el monopolio de Transbank. El proyecto partió hace más de diez años, pero ahora acaban de dar otro paso en pos de que en el comercio, sobre todo en las grandes empresas, puedan cohabitar como competencia de la histórica compañía que permite algo tan simple como pagar con tarjeta.

La firma acaba de suscribir un acuerdo con Visa que le permitirá operar con esta tarjeta en los comercios donde funciona y se suma al firmado en el año 2015 con Mastercard, en virtud del cual, a fines del año pasado, se habilitaron en los comercios que utilizan Multicaja las tarjetas de crédito de dicha marca. Los planes inmediatos indican que el modelo debe replicarse con Visa y también, en los próximos meses, con la tarjeta de débito de Mastercard, Maestro.

La noticia le viene bien a la empresa, pero saben que están operando en una cancha aún dispareja. Eso pese a que, ha pasado ya tiempo desde que, el 13 de enero de 2017, el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) recomendara al Gobierno dictar los preceptos legales o reglamentos necesarios para fomentar la competencia en la industria de medios de pago con tarjetas. “Prohibir la actuación conjunta de los bancos”, que además son dueños de Transbank, era una de las condiciones.

Pero en su minuto la salida de los entonces ministros de Economía, Luis Felipe Céspedes, y de Hacienda, Rodrigo Valdés, puso en entredicho que el Gobierno realizara un ajuste mayor para liberar el mercado de pagos con tarjeta. En ese tiempo el sucesor de Valdés, Nicolás Eyzaguirre, contestó mediante carta que «nuestro objetivo como ministerio es identificar y estudiar las vías institucionales idóneas para materializar aquellas medidas contenidas en la Propuesta Normativa que sean necesarias para fortalecer la competencia en esta industria y cuya implementación no genere costos que puedan neutralizar sus beneficios, por ejemplo, afectando la seguridad del mercado de pagos”.

La  decisión de el TDLC, en su minuto, además dejaba atrás una condición que permitía a Transbank negociar en bloque con los comercios a nombre de todos los bancos. Pero Etcheverrry, quien fue presidente de BancoEstado, asegura que el Gobierno anterior no mantuvo el aliento inicial de presionar por un cambio en las condiciones del mercado y todo se diluyó.

La apuesta es que la actual administración, y particularmente los ministerios de Hacienda y Economía, insistan en hacer cumplir lo recomendado por el TDLC. El mayor escollo siguen siendo las tasas de intercambio que cobran los emisores de tarjeta a Multicaja o cualquier otro operador del mercado de ese medio de pago.

«No es tan fácil como llegar y competir, porque hay una tasa que se llama tasa de intercambio. Por ejemplo, si en un gran comercio cobramos el 2,5% de esa operación, pero el banco cobra el 2%, quedamos con el 0,5% para cubrir todos los márgenes y es lo que más difícil hace el ingreso a grandes comercios», explica Etcheverry.

La propuesta de Multicaja es que el Gobierno tome la posta y le insista al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia que termine de explicitar cómo romper con las condiciones diferentes para un mismo negocio. «No todo tiene que ser mediante ley», plantea el socio de la señalada compañía, quien ya inició una serie de acercamientos con las autoridades para hacerles llegar minutas y datos, además de reunirse con asesores, para instarlos a ver lo relevante de abrir el negocio.

Mastercard, agrega Etcheverry, está haciendo un nuevo estudio del valor de las tasas de intercambio, y el mismo TDLC dijo en su recomendación que dicha tasa la debería fijar un ente independiente y no los emisores.

«Ahora falta avanzar la última la última milla, porque si Visa y Mastercard, que son las marcas, quieren que haya competencia, es lo mejor. No podemos seguir operando en este limbo», aseguró Etcheverry a El Mostrador.

La firma ya realiza 120 millones de operaciones al año y se maneja en punto de equilibrio, dice el ex gerente de BancoEstado, sin revelar detalles de la última línea.

Respecto a la puesta en marcha de la operación con Visa, añade que, una vez más, dependen de la voluntad de la sociedad de apoyo al giro, de las compañías de tecnología y del respaldo, nuevamente, de los mismos bancos. «Tomará su tiempo», puntualiza Etcheverry, quien tiene el foco puesto en que la dupla Larraín-Valente le dé un verdadero giro al histórico monopolio de mercado.

¿Qué le permitiría el cambio de condiciones? Al menos –dice– duplicar sus operaciones.

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