MERCADOS
Encuesta Cadem además revela que la percepción pública de que la economía progresa (41%) todavía se ubica significativamente en un nivel más bajo que quienes creen que está estancada o retrocediendo (57%).
Un mayoritario 56% piensa que Chile sólo está medianamente preparado en relación a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, según la encuesta Cadem correspondiente a la tercera semana de julio divulgada este lunes.
En el sondeo, un 18% que el país está mal preparado y 23% cree que Chile está bien preparado para enfrentar un escenario internacional más complejo.
La guerra comercial ha activado las alarmas en el Ejecutivo, sobre todo dado el impacto en el precio del cobre, la principal exportación del país.
El Gobierno se ha encontrado monitoreando el tema a través de Hacienda, en reuniones con ministros y actores económicos y una cita de los ministros para el Desarrollo Económico en La Moneda. Si bien el ministro Felipe Larraín ha reconocido que «Chile no está inmune a los efectos de una guerra comercial», pero el país «está bien preparado”, desde el empresariado se ha advertido que el PIB del país podría bajar a la mitad por efectos de esta pugna entre EEUU y China.
Asimismo, la encuesta revela que la percepción pública de que la economía progresa (41%), pero aún se ubica significativamente más abajo de quienes creen que está estancada o retrocediendo (57%). En una perspectiva de mediano plazo, un 40% cree que la situación económica del país mejorará durante el segundo semestre (especialmente en inversiones y crecimiento económico), mientras que un 49% cree que se mantendrá igual y sólo un 10% piensa que empeorará.
Los principales problemas percibidos de nuestra economía son “el desempleo” (31%), seguido por la inflación y el precio del cobre (18%). Más atrás se encuentran el escenario internacional (9%), el crecimiento de la economía (6%), la inversión, (5%), la productividad (4%), y el precio del dólar (4%).
En materia de evaluación presidencial, un 54% aprueba y un 33% desaprueba la gestión de Sebastián Piñera, cifras que no representan diferencias significativas con respecto a la semana anterior.
