Los organizadores de la marcha de estudiantes y de profesores que se realizó este jueves en todo el país en demanda de una mejor educación pública estimaron la cifra de convocados a nivel nacional en 400 mil personas, de los cuales 200 mil se manifestaron en la capital. El presidente del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, calificó la manifestación de «grandiosa y monumental» y anticipó que el movimiento «va a continuar». Gajardo agregó con cierta ironía, que el próximo jueves van a «hacer una gran playa para Joaquín Lavín, para que se vaya de vacaciones», en alusión a la decisión del ministro de adelantar las vacaciones de invierno en los más de 300 colegios que fueron ocupados por los estudiantes. En tanto, la presidenta de la Federación de Estudiantes de Chile (FECh), Camila Vallejo, sostuvo que «éste es un conflicto de carácter nacional» y emplazó al Presidente, Sebastián Piñera, a pronunciarse sobre las demandas de los estudiantes o realizar un plebiscito para reformar la educación pública. Respecto de las relaciones con el ministro de Educación, Joaquín Lavín, Vallejo llamó a que éste sea apartado de las negociaciones. «Creo que debería dar un paso a un lado hace mucho rato; no ha dado solución a este conflicto; ya llevamos mucho tiempo movilizados. El ministro debiera voluntariamente renunciar, yo creo que a él se le debiera adelantar las vacaciones», apostilló. Por su parte, el intendente Fernando Echeverría informó esta noche que tras la marcha, los incidentes que provocaron algunos encapuchados dejó a nivel nacional 121 detenidos (38 en Santiago) y al menos una veintena de carabineros lesionados. Añadió que los muchachos encapuchados intentaron saquear tres locales comerciales; dañaron varias sucursales bancarias y también el frontis de la embajada de Brasil «por lo que no se autorizarán nuevas marchas por la Alameda».
