Ráfagas de viento de hasta 100 km/h, sumado al irrespirable aire que se genera, obligaron a la población de Yazd, en Irán, a buscar refugio.
La ciudad de Yazd, ubicada en el centro de Irán, sufrió las consecuencias de una impresionante tormenta de arena que hasta el momento dejado 10 personas heridas, según señalan medios locales.
El polvo se apoderó de la ciudad envolviendo calles y monumentos enteros. El fenómeno comenzó sorpresivamente y muchos turistas registraron el momento que se viralizó rápidamente en redes sociales, donde muchos quedaron impresionados con la magnitud «cinematográfica» de la tormenta.