No habíamos visto ese movimiento que lo coronó como mejor bailarín.
Ya empezaron las Fiestas Patrias y como es costumbre, los establecimientos se empeñan en que los y las alumnas aprendan el baile típico chileno y puedan bailar uno o más pies de cueca en sus casas.
Para motivarlos, generalmente se realizan concursos para ver quién aprendió mejor los pasos como la media luna o el zapateo y fue en esa ronda de exposición cuando un niño haitiano llamó la atención con un movimiento que pocos y pocas habíamos visto: dejó caer un primer pañuelo al suelo y desde el cinturón sacó otro que tenía escondido. El truco chilensis-haitiano y su buena destreza en los pasos que simulan el cortejo del gallo a la gallina, lo coronó como el mejor bailarín este septiembre.