«Las detenciones arbitrarias continúan como parte la sistemática represión que ejerce el Gobierno de Myanmar contra la libertad de expresión y asociación», advirtió el organismo.
Al menos 700 birmanos continúan detenidos desde que las fuerzas de seguridad de la Junta Militar de Birmania (Myanmar) aplastaron a finales de septiembre las manifestaciones en favor de la democracia, denunció este miércoles Amnistía Internacional.
La organización comprometida con la defensa de los derechos humanos, también denunció que las autoridades militares han detenido en noviembre a varias decenas de miembros y simpatizantes de la oposición, activistas de grupos cívicos, así como monjes budistas.
«Las detenciones arbitrarias continúan como parte la sistemática represión que ejerce el Gobierno de Myanmar contra la libertad de expresión y asociación», señaló Amnistía Internacional.
Según este grupo internacional, entre los detenidos durante las últimas semanas, figuran Aung Zaw Oo, activista dedicado a promover el respeto de los derechos humanos, y Myint Naing, destacado miembro de la Liga Nacional por la Democracia (LND).
La pasada semana, el diario «Nueva Luz de Myanmar», órgano de propaganda del régimen, señaló que permanecían detenidas 91 de las 3.000 personas arrestadas por las fuerzas de seguridad durante y después de las multitudinarias manifestaciones llevadas a cabo el pasado septiembre en Rangún y otras ciudades del país.
Por su parte, la LND, que encabeza la Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi, denunció que seguían produciéndose detenciones de políticos, y advirtió de que las acciones de esa índole obstruyen el inicio de un diálogo con la Junta Militar.
Suu Kyi, quien cumple arresto domiciliario desde junio de 2003, ha propuesto a la Junta Militar una vía de diálogo para intentar alcanzar la reconciliación nacional.
EFE
