Los músicos fueron vistos por última vez el martes cuando, con todos sus instrumentos y sus maletas, abordaron un taxi en una posada en Olinda, ciudad histórica vecina a Recife y en donde estaban hospedados.
La policía brasileña abrió una investigación para intentar establecer el paradero de tres integrantes de un conjunto musical cubano que están desaparecidos desde el martes, cuando tenían que regresar a su país tras una serie de presentaciones en Brasil.
La superintendencia de la Policía Federal en el estado de Pernambuco (nordeste) informó hoy que carece de pistas sobre la ubicación de los músicos, en tanto que versiones de prensa indican que pudieron haber desertado ayudados por una pareja de bailarines brasileños.
El trío fue identificado como el vocalista Arodis Verdecia Pompa y los guitarristas Juan Alcides Díaz y Miguel Ángel Costafreda, integrantes del grupo Los Galanes, que realizó una serie de presentaciones entre el 5 y el 11 de diciembre en Recife, la capital de Pernambuco, y en otros municipios del estado.
Los músicos fueron vistos por última vez el martes cuando, con todos sus instrumentos y sus maletas, abordaron un taxi en una posada en Olinda, ciudad histórica vecina a Recife y en donde estaban hospedados.
«Primero vamos a intentar localizar a los cubanos para verificar si ocurrió algún accidente o si quieren pedir asilo político», afirmó el director de comunicación de la Policía Federal en Pernambuco, Giovani Santoro.
«Después vamos a ver cuándo vence el plazo de la visa con la que ingresaron al país y a tomar la medidas legales», agregó.
La legislación brasileña permite que los cubanos permanezcan en el país hasta el vencimiento de la visa, generalmente de tres meses, y estipula un plazo de ocho días para que lo abandonen en caso de que estén con el visado vencido.
Los otros integrantes del grupo Los Galanes y un representante del Gobierno cubano que los acompañó a Brasil están desde ayer en el país caribeño.
El productor brasileño Jair Pereira, que organizó las presentaciones en Recife, dijo que los demás músicos dijeron no saber nada de sus compañeros.
«Ellos nunca manifestaron deseo de quedarse en Brasil. Decían apenas que querían ampliar la gira y pasar más tiempo en Brasil», dijo Pereira.
«Infelizmente la hipótesis más probable es que ellos no quieran volver a Cuba», añadió.
En septiembre pasado el Comité Nacional para los Refugiados (Conare) de Brasil concedió refugio a dos deportistas cubanos que desertaron durante los Juegos Panamericanos celebrados en junio pasado en Río de Janeiro.
Los beneficiados fueron el jugador de balonmano Rafael Costa Capote y el ciclista Michel Fernández García, que durante los Juegos Panamericanos abandonaron la delegación cubana.
Costa Capote y Fernández García fueron dos de los cuatros miembros del equipo cubano que dejaron la delegación durante los Juegos Panamericanos.
Los otros dos fueron los boxeadores Guillermo Rigondeaux y Erislandy Lara, quienes fueron deportados el 4 de agosto pasado hacia La Habana tras un confuso incidente.
Rigondeaux, de 26 años, y dos veces campeón mundial y olímpico, y Lara, de 24, y campeón mundial de la categoría welter, desaparecieron poco antes de presentarse al pesaje previo a su competición en los Panamericanos.
Fueron localizados días después por la Policía, pero negaron que hubiesen desertado.
Los deportistas dijeron que habían sido engañados por un empresario que les ofreció un contrato para boxear profesionalmente en Alemania y, según afirmaron fuentes oficiales brasileñas, manifestaron su deseo de regresar a Cuba.
EFE
