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Gobierno iraní confirma haber recibido combustible nuclear para Busheh

El presidente de la Organización de Energía Atómica de Irán, Reza Aqazadeh, reiteró que su país utilizará esta planta para generar electricidad, y pronosticó que entrará en funcionamiento el «año próximo», ya que «han finalizado el 95 por ciento de las obras de construcción».


El Gobierno iraní confirmó este lunes haber recibido 80 toneladas de combustible nuclear enviado por Rusia para la central atómica de Bushehr, que ingenieros rusos construyen en el este iraní.



«La primera remesa llegó hoy, lunes, y el suministro de combustible continuará y llegará a Irán conforme a las fechas acordadas» con Moscú, dijo el presidente de la Organización de Energía Atómica de Irán, Reza Aqazadeh, según la agencia IRNA.



«La primera remesa para la central de Bushehr es de unas 80 toneladas», recalcó.



Aqazadeh reiteró que su país utilizará esta planta para generar electricidad, y pronosticó que entrará en funcionamiento el «año próximo», ya que «han finalizado el 95 por ciento de las obras de construcción».



La empresa rusa Atomstroyexport anunció en un comunicado que comenzó a suministrar combustible nuclear para Bushehr, y que la primera remesa, en contenedores sellados por inspectores del OIEA, llegó ya a la planta y quedó guardada en un depósito especial bajo un sistema de control y vigilancia internacional.



El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Manushehr Mottaki, citado por la televisión iraní Al Alam, ha elogiado la postura de Moscú que «apoya el derecho de Irán de utilizar la energía atómica para fines pacíficos».



Mottaki reveló que la República Islámica y Rusia alcanzaron la semana pasada un acuerdo sobre un calendario para el envío de combustible nuclear para Bushehr, y reafirmó que «nuestro programa es pacífico desde el principio».



También reiteró que Teherán quiere que el contencioso por su programa atómico sea tratado sólo por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y no por el Consejo de Seguridad de la ONU, aparentemente para evitar el endurecimiento de las sanciones a Irán.



Las autoridades iraníes, encabezadas por el presidente Mahmud Ahmadineyad, han afirmado en varias ocasiones que no abandonarán el enriquecimiento de uranio en el interior de Irán, al considerar que «es uno de los derecho legítimos del pueblo iraní».



EEUU y la Unión Europea (UE) presionan, por su parte, a Teherán para que cumpla con las dos resoluciones adoptadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en relación con el contencioso, que exigen con claridad que Irán suspenda el enriquecimiento de uranio, una materia de doble uso, militar y civil.



La puesta en marcha de la planta de Bushehr, de 1.000 megavatios de potencia, se ha visto retrasada en varias ocasiones por problemas en la financiación del proyecto, con un valor estimado de entre 800 y 1.200 millones de dólares.



Atomstroyexport había declarado que los suministros de combustible nuclear comenzarían seis meses antes de iniciar el ciclo tecnológico del reactor de Bushehr.



EFE

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